181 lesiones por pólvora en Bogotá: padres arriesgan patria potestad por menores

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En Colombia, los padres que permitan a menores de edad manipular pólvora enfrentan sanciones severas que van desde seguimientos por parte de entidades competentes hasta la posible pérdida de la patria potestad, según advierten expertos como la abogada auditora Ángela Joya del Centro Jurídico Internacional a Asuntos Legales y el abogado penalista Juan Francisco Navarrete de Navarrete Consultores. Esta advertencia cobra relevancia en el periodo 2024-2025, donde se han reportado 181 casos de lesiones por pólvora en Bogotá, impulsados por el uso de pirotécnicos durante las fiestas de fin de año.

El Observatorio de Salud de Bogotá, dependiente de la Secretaría de Salud, registró cifras alarmantes: 34 quemaduras de primer grado, 52 de segundo grado y 31 víctimas menores de edad, lo que subraya la prohibición absoluta establecida en la Ley 670 de 2001, vigente desde julio de ese año, que impide que ningún menor manipule pólvora y responsabiliza directamente a los adultos. Esta norma se complementa con la Ley 1801 de 2016 y diversos decretos municipales y regionales, todo en aras de proteger la vida, la integridad física y la recreación de los niños, tal como lo establece el artículo 44 de la Constitución Política.

Cifras que evidencian un riesgo creciente

El aumento anual de casos en diciembre resalta la urgencia de la prevención, ya que las lesiones por pólvora no solo afectan la salud inmediata de los menores, sino que generan secuelas a largo plazo. Las autoridades enfatizan que cualquier adulto que facilite o tolere esta práctica podría ser denunciado, activando procesos que involucran vigilancia y posibles medidas extremas como la suspensión de derechos parentales.

Canales para denuncias y protección infantil

Para combatir esta situación, las denuncias se pueden interponer ante la Policía Nacional a través de la línea 123 o directamente al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), facilitando una respuesta inmediata que priorice la seguridad de los niños. Expertos como Joya y Navarrete insisten en que la responsabilidad recae en los padres y tutores, recordando que la normativa colombiana es clara y no admite excepciones en la manipulación de estos elementos por parte de menores.

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