El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) publicará este jueves 5 de diciembre de 2025, a las 6:00 de la tarde, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) anual de noviembre, un dato fundamental que marcará el inicio formal de las negociaciones para definir el salario mínimo de 2026 en la Comisión de Concertación de Políticas Salariales y Laborales (Ccpsl). Este proceso tripartito reunirá a representantes del Gobierno Nacional, liderados por el ministro del Trabajo, Antonio Sanguino, junto a los gremios empresariales como la Andi, Fenalco, Acopi, SAC y Asobancaria, confederaciones de pensionados como la CPC y CDP, el Banco de la República y el Ministerio de Hacienda. El objetivo es ajustar el salario mínimo actual de 1.423.500 pesos por la inflación para preservar el poder adquisitivo de los cerca de 3,7 millones de trabajadores que dependen de él, con un plazo para llegar a un acuerdo hasta el 15 de diciembre y un límite para expedir el decreto presidencial el 30 de diciembre.
El IPC, que mide la inflación y el costo de vida en Colombia, sirve como base para actualizar salarios, pensiones y contratos, y en octubre de 2025 registró un 5,51% anual, con una inflación general en 5,5%. Bajo el gobierno del presidente Gustavo Petro, el salario mínimo ha acumulado un incremento del 37,6%, con aumentos reales del 3% aproximado en 2022 y 2023, y del 4,5% en 2024. Este esfuerzo se enmarca en un contexto económico positivo, con un crecimiento del PIB del 2,7% y un 3,6% en el último trimestre, una tasa de desempleo del 8,2% —la más baja del siglo— y el salario vital recomendado por la OIT para una familia de cuatro personas en torno a los 3.000.000 pesos como referencia aspiracional.
Proceso de concertación y expectativas gubernamentales
La negociación, que ya avanza en su fase preliminar, incluye un calendario detallado: la Subcomisión de Productividad con datos del Dane sobre Productividad Total de los Factores, la instalación de la mesa con información sobre el PIB del tercer trimestre de 2025 y el mercado laboral, seguidas de presentaciones del Dane con el IPC, del Ministerio de Hacienda sobre la macroeconomía y del Banco de la República con sus proyecciones, jornadas de concertación y un estudio de salvedades el 18 de diciembre. Si no hay consenso, el Gobierno emitirá el decreto correspondiente. El ministro Sanguino ha expresado optimismo por lograr un pacto entre trabajadores y empresarios con el acompañamiento estatal.
“Estamos contentos por anunciarle al país el inicio de esta discusión, y muy expectantes y optimistas en el sentido de que podamos lograr un acuerdo entre trabajadores y empresarios, con el acompañamiento del gobierno alrededor de un incremento como se espera. Vamos a mantener la vocación de un aumento real de los ingresos”
Antonio Sanguino, ministro del Trabajo
El funcionario destacó los logros del gobierno Petro en esta materia, subrayando cómo estos incrementos han contribuido al dinamismo económico del país.
“En el Gobierno del presidente Gustavo Petro hemos incrementado en 37,6% acumulado el salario mínimo y año a año ha significado una diferencia entre inflación e incremento salarial, por ejemplo, en el 2022, tuvo un aumento real cercano al 3%, lo mismo que en el 2023 y en el 2024, llegando a un 4,5%. Con esa vocación vamos a concurrir desde el gobierno y con la opinión del presidente de la República en esta materia”
Antonio Sanguino, ministro del Trabajo
“Queremos reiterar que este esfuerzo del Gobierno Nacional, esta decisión del incremento del salario mínimo y de mejora de los ingresos, es una de las razones que explican el comportamiento positivo de nuestra economía, con un crecimiento del 2,7%, que en el último trimestre se disparó a 3,6% el Producto Interno Bruto, con una tasa de desempleo la más baja del siglo en 8,2% y con un control de la inflación en el 5,5%”
Antonio Sanguino, ministro del Trabajo
Esta ronda de concertación no solo definirá el futuro inmediato de millones de familias colombianas, sino que también reflejará el equilibrio entre el control inflacionario, el crecimiento económico y la protección del ingreso real de los trabajadores en un año marcado por indicadores positivos pero desafíos persistentes en el mercado laboral.

















