Fabio Andrés Palacios Romaña, un futbolista colombiano de 23 años oriundo de Vigía del Fuerte en Chocó, falleció la mañana de este lunes en un trágico accidente de tránsito en la Autopista Amaral, cerca de la Carretera Amaral Peixoto (RJ-106), en Cabo Frio, Río de Janeiro, Brasil. El joven defensor central, de 1,87 metros de altura y conocido como Fabinho en São Pedro da Aldeia donde se había radicado, chocó con su motocicleta contra un minibús de la empresa Auto Viação Salineira mientras se dirigía a su trabajo como repartidor de una aplicación de entregas. Su familia, de escasos recursos y encabezada por su padre Diomedes Palacio Flórez, ha lanzado un llamado urgente de colaboración para repatriar su cuerpo a Colombia, estimando un costo de hasta 30 millones de pesos, e incluso ha solicitado ayuda a la Cancillería colombiana.
Palacios Romaña había llegado a Brasil en agosto con el sueño de consolidarse en el fútbol profesional, tras intentos fallidos en Colombia. Militó en equipos aficionados como Semillas de Paz y Vida en la comuna 13 de Medellín y Pantera Fútbol Club en la Liga Antioqueña de Fútbol, donde era considerado un talento prometedor. El medio Rc24h confirmó su identidad como el motociclista fallecido en la carretera de la Integración, resaltando la conmoción generada en su entorno por esta pérdida inesperada.
El sueño truncado y las voces de dolor
Juan Carlos González, presidente del Club Pantera, recordó con tristeza el paso de Fabio por el equipo: «En agosto se fue para Brasil, estaba a prueba en la tercera división y no pudo lograr su sueño allá». Agregó sobre sus cualidades: «Medía 1,87, era defensor central, un excelente jugador. Es triste porque el talento hay que mandarlo a otros lugares, a otras ciudades». Antes de partir, el joven le había enviado un mensaje a su padre: «Pa, me voy pa Brasil, a intentarlo la última vez», reflejando su determinación por una última oportunidad.
«Que nos colaboren con el traslado del cuerpo de mi hijo, ya que él es colombiano»
Diomedes Palacio Flórez, padre de Fabio
La tragedia ha desatado un debate sobre las escasas oportunidades en el fútbol colombiano, con críticas a la corrupción en el sistema. Willington Cano, líder social y dirigente del Club Semillas de Vida y Paz, lamentó: «Qué triste ver cómo estos talentos salen del país a buscar un mejor futuro y regresan en un cajón porque en este país no hay oportunidades para los muchachos. Basta ya, ellos, nuestros talentos, no pueden salir a buscar en otros países su futuro porque nuestro fútbol se volvió una guarida de corrupción de bandidos sin tacha que lo único que hacen es cobrar a los talentos para poder jugar fútbol profesional».
Conmoción en Vigía del Fuerte y solidaridad
En su natal Vigía del Fuerte, la noticia ha generado profunda consternación. La Administración Municipal, encabezada por la alcaldesa Jhoselin Lozano Mena, expresó: «Hoy, la comunidad pierde no solo a un hijo valioso, sino también a un ser humano lleno de sueños, energía y esperanza. A su familia, amigos y seres queridos, les enviamos un abrazo solidario y nuestras más sinceras condolencias. Que su memoria perdure como ejemplo de juventud y vitalidad. Paz en su tumba». Este suceso subraya la vulnerabilidad de los jóvenes talentos que emigran en busca de un futuro mejor, dejando un llamado a reflexionar sobre las estructuras del deporte nacional.
