Libaniel Marulanda: trayectoria y contexto del autor del Quindío
En el panorama literario regional, Libaniel Marulanda aparece como una figura cuya obra se alimenta de vivencias urbanas y una mirada disciplinada hacia el lenguaje. Sus creaciones, reconocidas por varios galardones en el ámbito de los cuentos, incluyen títulos como La luna ladra en Marcelia, Al son que me canten cuento y La Camarada María y otras carretas, de acuerdo con Crónica del Quindío.
Según la crónica, su infancia y adolescencia transcurrieron entre Calarcá y Armenia, en un periodo marcado por la pérdida de figuras adultas y cambios constantes de domicilio. La situación de su madre, madre soltera, condicionó años formativos y una modalidad de vida caracterizada por la movilidad y la necesidad de afrontar limitaciones económicas, factores que, según la fuente citada, influenciaron su visión sobre la realidad y la cultura local.
La historia de desarrollo de Marulanda destaca un giro definitivo cuando obtuvo un puesto como mensajero en la administración de impuestos de Calarcá. El acceso al empleo llegó gracias a la intervención de una allegada de su madre, lo que permitió su inserción en un entorno urbano con mayor actividad cultural y política, en un periodo en el que el país atravesaba el Frente Nacional.
- Obras relevantes: La luna ladra en Marcelia, Al son que me canten cuento, La Camarada María y otras carretas.
- Reconocimientos: premios literarios por relatos cortos (sin especificar) según fuentes regionales.
- Contexto vital: transición desde ámbitos rurales del Quindío hacia la vida citadina y su cultivo literario.

















