El presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, lanzó duras críticas contra la Corte Constitucional al acusarla de sabotear la reforma pensional mediante un empate cuatro a cuatro en la Sala Plena, que suspende su futuro y lo deja en manos del conjuez Carlos Pablo Márquez. En un pronunciamiento publicado en la red social X, Petro atribuyó esta situación a un sectarismo ideológico y egoísmo social, señalando específicamente al magistrado Jorge Enrique Ibáñez como el principal responsable por su manejo desastroso del asunto. El empate surgió durante la revisión de la reforma aprobada por el Congreso en dos ocasiones y ya sancionada por el Ejecutivo, donde cuatro magistrados —Juan Carlos Cortés, Miguel Polo Roso, Vladimir Fernández y Natalia Ángel— defendieron que el debate en la Cámara de Representantes había subsanado los errores previos señalados por la Corte, mientras que otros cuatro —Ibáñez, Lina Marcela Escobar, Paola Meneses y Carlos Camargo— exigieron una nueva resubsanación por falta de deliberación democrática suficiente.
La Corte Constitucional se encuentra profundamente dividida: un bloque considera que el trámite legislativo en la Cámara corrigió las deficiencias identificadas en la primera resolución de la Corte, que había advertido un debate insuficiente, mientras que el otro insiste en que no hubo deliberación democrática adecuada. Este empate técnico deja pendiente la decisión final ante el conjuez Márquez, y un posible rechazo de la reforma podría generar dificultades o incluso la quiebra de los fondos privados de pensiones, según advierte el Gobierno. Petro enfatizó que no hay razón para devolver la iniciativa por tercera vez en medio de la campaña electoral, imponiendo una presión innecesaria.
Críticas frontales del mandatario al Poder Judicial
Desde sus redes sociales, el jefe de Estado no escatimó en palabras para defender la reforma como un derecho fundamental de los colombianos. Insistió en que el Estado social de derecho, consagrado en la Constitución, no se reduce a un mero Estado de derecho formal, y desafió a quienes lo cuestionan a ganar elecciones para derogar la Carta Magna actual. Petro proyectó las consecuencias matemáticas de no aprobar la reforma, advirtiendo de un colapso inminente en el sistema previsional.
“No hay razón para devolver por tercera vez la reforma pensional y ponernos en medio de la campaña electoral, a una presión innecesaria”
Gustavo Petro Urrego, Presidente de la República
“Lo he advertido, y les parece amenaza cuando es simple matemática proyectada a pocos años adelante”
Gustavo Petro Urrego, Presidente de la República
El presidente centró sus dardos en el magistrado Ibáñez, a quien acusó de sectarismo ideológico que lo inhabilita para tratar el tema. Defendió la iniciativa como el corazón del Estado social de derecho, negando que sea inconstitucional luchar contra la pobreza y exaltando el derecho de los adultos mayores a vivir dignamente, sin morir abandonados en calles o plazas de mercado.
“El problema mayor es el sectarismo ideológico del magistrado Ibáñez, que lo inhabilita por haber tratado de una manera tan desastrosa este asunto”
Gustavo Petro Urrego, Presidente de la República
“El derecho para un viejo o vieja de vivir dignamente y no morir tirado solo en una calle o en una plaza de mercado. Este es un derecho de la gente de Colombia”
Gustavo Petro Urrego, Presidente de la República
En este contexto de tensión entre el Ejecutivo y la Judicatura, el futuro de la reforma pensional pende de un hilo a la espera de la ponencia del conjuez Márquez, mientras el debate nacional sobre equidad social y sostenibilidad previsional se intensifica en vísperas electorales.
“Estado social de derecho no es Estado de derecho. Si quieren lo último, ganen elecciones y deroguen la constitución actual”
Gustavo Petro Urrego, Presidente de la República
“No es inconstitucional luchar contra la pobreza, es el corazón del Estado social de derecho”
Gustavo Petro Urrego, Presidente de la República
