El dólar estadounidense abrió este 16 de diciembre en 3.815,82 pesos colombianos, registrando una ligera baja del 0,11 por ciento frente al cierre anterior de 3.820,17 pesos, según el reporte de Dow Jones al inicio de la sesión en Colombia. Esta cotización del par USD/COP refleja la reacción del mercado a eventos políticos recientes, así como a la incertidumbre fiscal, energética y externa que domina el panorama económico nacional.
En el corto plazo, la moneda mostró una variación semanal negativa del 0,65 por ciento, mientras que en lo que va del año acumula una caída del 12,97 por ciento, con una volatilidad semanal menor comparada con la anual y una cotización previa que había subido un 0,05 por ciento. Estas fluctuaciones ocurren en un contexto donde el peso colombiano se mantiene bajo el control del Banco de la República, respaldado por monedas en circulación de 50, 100, 200, 500 y 1.000 pesos, siendo las de 500 y 1.000 bimetálicas, con diseños que incluyen el oso de anteojos, la guacamaya bandera, la rana de cristal y la tortuga caguama.
Perspectivas optimistas para 2025 con riesgos latentes
Corficolombia proyecta para 2025 un crecimiento del PIB del 2,6 por ciento, impulsado por el consumo privado y la inversión, junto con una inflación que cerraría el año en el 4 por ciento, tras la baja registrada en 2024. Sin embargo, estas expectativas optimistas se ven temperadas por riesgos fiscales, sociales, de inseguridad y externos, como un dólar fuerte en el mercado internacional y las políticas asociadas a la figura de Trump. A pesar de la morosidad creciente, el sistema financiero colombiano mantiene su resiliencia.
Esta dinámica cambiaria subraya la necesidad de vigilancia por parte de las autoridades monetarias y resalta la fortaleza relativa del peso en un entorno global volátil, donde Colombia navega entre oportunidades de recuperación y desafíos estructurales que definirán el rumbo económico del próximo año.

















