Rigoberto Urán, el destacado ciclista colombiano, abrió su corazón en el podcast «Los hombres sí lloran» para revelar el profundo impacto que tuvo el asesinato de su padre, Rigoberto de Jesús Urán Zapata, en su vida. El hecho ocurrió en 2001 en Urrao, Antioquia, cuando Urán tenía apenas 14 años: su padre fue víctima de paramilitares durante un robo un sábado, y el lunes siguiente el joven ya debía asumir un trabajo para sostener a su madre y hermanos, sin siquiera poder ver el cuerpo de su progenitor y preservar así su última imagen viva.
Obligado a madurar de golpe, Urán comenzó a vender chance, igual que hacía su padre, en medio de una situación familiar compleja que le impidió procesar el duelo adecuadamente. Ese dolor reprimido emergió años después en forma de llanto descontrolado durante embriagueces, hasta que recientemente su esposa Michelle lo envió a terapia para confrontar ese trauma no resuelto.
La presión de ser líder en el ciclismo
Urán explicó cómo la exigencia de ocultar emociones como líder de equipo ciclista agravó su situación emocional. En el Tour de Francia de 2017, donde alcanzó el segundo lugar general, observó a compañeros como Chris Froome con expresiones «vacías» pese a sus victorias, y él mismo reprimió cualquier muestra de debilidad para no desmotivar a sus siete compañeros que lo veían como ídolo.
«Una de las cosas más bravas que me pasó fue cuando muere mi papá, mi papá es asesinado en un robo en el año 2001, quedamos nosotros con una situación muy compleja y yo (…) Pues él muere un sábado, el lunes ya yo, pues tengo que empezar a trabajar. Entonces (…)»
Rigoberto Urán, ciclista
«Yo dije: ‘Bueno, no me ha dado tan duro lo de mi papá’. Jueputa, qué cosa tan brava. O sea, hasta hace poquito Michelle (su esposa) me mandó a hacer terapia porque me pasaba algo (…) Cuando me emborrachaba, me daba un sentimiento y una falta mi papá, que yo después de ya de cinco botellas de aguardiente, yo empezaba a llorar»
Rigoberto Urán, ciclista
En una reflexión más amplia sobre el deporte profesional, Urán afirmó que hoy, en 2025, ningún atleta de élite disfruta verdaderamente de su disciplina debido a las presiones constantes.
«Michelle dijo: ‘Usted tiene un problema ni el hijueputa’. ¿Por qué? Porque no hice ese duelo. No fui capaz de verlo muerto porque me quería quedar con la imagen de él»
Rigoberto Urán, ciclista
«Claro. Cuando eres deportista y vas a enfrentar unas de las competencias más importantes, no puedes mostrarte así porque eres el líder y tienes siete malparidos del equipo que tú eres el ídolo. Y si el ídolo está llorando, entonces el equipo ¿qué va a hacer?»
Rigoberto Urán, ciclista
«Hoy, en el año 2025, ningún deportista a nivel profesional disfruta de su deporte. Ninguno»
Rigoberto Urán, ciclista
Esta confesión forma parte de un episodio del podcast conducido por el actor Juan Pablo Raba, disponible en plataformas como TikTok e Instagram de «Los hombres sí lloran» y del propio Urán, donde el pedalista urraense pone sobre la mesa la importancia de procesar el duelo en un mundo del deporte que aún penaliza la vulnerabilidad emocional.

















