Fitch Ratings, la agencia de calificación crediticia, rebajó la calificación crediticia de Colombia de ‘BB+’ a ‘BB’ con perspectiva estable el 16 de diciembre, una decisión que impacta directamente la percepción financiera del país bajo el gobierno del presidente Gustavo Petro. Esta rebaja se basa en un análisis detallado que destaca la persistencia de déficits fiscales elevados, el aumento sostenido de la deuda pública y la ausencia de un ancla fiscal creíble, lo que ha deteriorado la confianza internacional en la economía colombiana.
Entre las cifras más alarmantes figuran el déficit fiscal del Gobierno Central proyectado en 6,7% del PIB para 2024 y 6,5% para 2025, junto con un déficit primario de 2,4% este año y 2,9% el próximo, alcanzando incluso hasta 7,5% en 2026. Además, el gasto primario para 2025 registrará un aumento del 13%, en un contexto de bajo crecimiento económico, limitada capacidad de ajuste presupuestario y la modificación de la regla fiscal impulsada por el presidente Petro durante su mandato, lo que agrava el deterioro fiscal estructural.
Reacciones de expertos y exfuncionarios
José Manuel Restrepo, exministro de Hacienda y actual rector de la Universidad EIA, enfatizó la necesidad urgente de correcciones profundas al afirmar que se requiere un equipo técnico de alto nivel para enderezar el rumbo económico.
“Se va a requerir un equipo técnico del más alto nivel para corregir el rumbo, que incorpore caminos para crecer más, atraer inversión, generar confianza, revisar exenciones y evasión, que modifique la estructura tributaria para crecer y que avance en una estrategia audaz de desregulación”
José Manuel Restrepo, exministro de Hacienda y rector de la Universidad EIA
Restrepo también alertó sobre la magnitud del problema, describiéndolo como una destrucción económica significativa que demanda una estrategia audaz y comprehensiva con un equipo técnico potente.
“La destrucción económica es significativa y necesita una estrategia audaz y comprehensiva y un equipo técnico muy potente para solucionarla”
José Manuel Restrepo, exministro de Hacienda y rector de la Universidad EIA
Por su parte, Carolina Restrepo Cañavera, abogada, matizó que Colombia no se ‘quiebra’ por esta rebaja, sino que refleja una caída en la confianza en el ancla fiscal, con el outlook estable como una advertencia más que pánico, sostenida por el historial de estabilidad macrofinanciera y la independencia del Banco de la República.
“Colombia no se ‘quiebra’ porque Fitch baje de BB+ a BB. Lo que dice es otra cosa: cayó la confianza en el ancla fiscal. El outlook estable no es pánico; es advertencia. Lo que aún sostiene a Colombia es su historial de estabilidad macrofinanciera y un Banco de la República independiente”
Carolina Restrepo Cañavera, abogada
El exsenador y dirigente gremial Juan Carlos Vélez Uribe criticó duramente al gobierno Petro, argumentando que si la economía estuviera en buen estado como se pregona, no habría ocurrido esta rebaja, y advirtió sobre un hueco fiscal inmenso que explotará en crisis económica en 2026 para el próximo gobierno.
“si la economía colombiana estuviera viento en popa como lo pregona el gobierno Petro, Fitch Ratings no le hubiera bajado la calificación al país. El hueco fiscal es inmenso y en el 2026 le va a explotar la crisis económica en las manos al próximo gobierno”
Juan Carlos Vélez Uribe, exsenador y dirigente gremial
Advertencias de otras agencias y contexto adicional
S&P Global Ratings emitió una advertencia similar, señalando posibles rebajas adicionales en los próximos 12 a 18 meses si no se toman medidas efectivas para estabilizar las cuentas fiscales, controlar la deuda y sostener el crecimiento del PIB.
“podríamos rebajar nuestras calificaciones de Colombia en los próximos 12 a 18 meses si el gobierno no toma medidas efectivas y oportunas para estabilizar las cuentas fiscales y los niveles de deuda, a la vez que sostiene el crecimiento del PIB del país”
S&P Global Ratings
Otras voces como la diseñadora Natalia García han criticado el deterioro fiscal, mientras que Lisandro Junco, exdirector de la Dian, lo interpreta como un aumento en el riesgo de impago, y Sebastián Toro, fundador de Arena Alfa, lo atribuye directamente al manejo fiscal del gobierno. Esta rebaja encarece el acceso a financiamiento externo, aunque Colombia mantiene su grado de inversión según Moody’s, que reconoce resiliencia macroeconómica pese a las crecientes presiones fiscales, y en junio de 2025 S&P ya había advertido sobre riesgos futuros. Los factores de soporte persisten en el historial de estabilidad e independencia del Banco de la República, pero la posición vulnerable del país exige acciones inmediatas.

















