La presentadora de Día a Día, Carolina Cruz, conmovió a sus seguidores al compartir en sus historias de Instagram una emotiva videollamada navideña protagonizada por sus hijos Matías y Salvador, junto a su sobrina Gabriela, quienes enviaron un mensaje cargado de cariño a su abuelo Iván Cruz Alzate, actualmente enfermo en Manizales. La publicación incluyó también fotos de la celebración familiar en Miami, donde el actor Lincoln Palomeque, expareja de Carolina tras casi cinco años de separación, acompañó a los niños y al resto de la familia en la Nochebuena.
Desde la distancia, los nietos Cruz unieron sus voces en un gesto de amor hacia Iván Cruz Alzate, quien recibe atención constante de sus hijos y vive bajo el cuidado de su esposa Pilar en la capital caldense. Este video y las imágenes reflejan la unión familiar pese a las circunstancias, en un momento delicado por el estado de salud del abuelo, divorciado de Luz María Osorio —padres de Carolina— después de 20 años de matrimonio.
Un mensaje de amor en tiempos difíciles
Carolina Cruz ha sido abierta sobre la situación de su padre en redes sociales, como lo hizo en junio pasado durante el Día del Padre, y esta vez optó por historias efímeras en Instagram para mostrar cómo la familia mantiene el contacto. Las fotos capturan a Lincoln Palomeque integrándose en la celebración con los hijos de la pareja y el clan extendido, destacando una convivencia armónica a pesar de la ruptura sentimental.
“Te amamos, abuelito. Pronto juntos todos. Los nietos Cruz”
Matías, Salvador y Gabriela, nietos de Iván Cruz Alzate
La presentadora expresó su profundo afecto en la publicación, subrayando el vínculo inquebrantable con su progenitor.
“Papi, te amo con todo mi corazón. Él sabe que lo amo con toda mi alma, que quisiera tenerlo aquí al lado, pero no está conmigo porque está con su esposa y la familia de ella en Manizales”
Carolina Cruz, presentadora de Día a Día
La iniciativa de Carolina fue ampliamente celebrada por sus seguidores en redes sociales, quienes elogiaron la fortaleza familiar y el espíritu navideño que trasciende distancias y desafíos personales, reafirmando los lazos de sangre en un contexto de salud frágil y separaciones pasadas.
