Desde su posesión en agosto de 2022 hasta diciembre de 2025, el presidente Gustavo Petro ha impulsado la salida de más de 70 generales y almirantes de la Fuerza Pública de Colombia, logrando tres renovaciones completas de la cúpula militar y policial. Estas decisiones, anunciadas desde la Casa de Nariño y la Escuela General Santander, se han materializado mediante órdenes presidenciales, ruedas de prensa y mensajes en su cuenta de X, con el objetivo de alinear las Fuerzas Militares y la Policía Nacional con la doctrina de Seguridad Humana, excluyendo a oficiales con antecedentes en violaciones de derechos humanos o corrupción, al tiempo que responde al incremento de la violencia y prepara el terreno para las elecciones de 2026.
En la primera ola de cambios, el 12 de agosto de 2022, se removieron 52 generales, distribuidos en 24 de la Policía Nacional, 16 del Ejército Nacional, 6 de la Fuerza Aérea y 6 almirantes de la Armada, incluyendo figuras como Hélder Fernán Giraldo Bonilla como comandante general de las Fuerzas Militares, Luis Mauricio Ospina Gutiérrez del Ejército, Francisco Hernando Cubides de la Armada, Luis Carlos Córdoba Avendaño de la Fuerza Aérea y Henry Armando Sanabria Celi de la Policía. Esta dinámica se repitió en mediados de julio de 2024 con la salida de Francisco Hernando Cubides Granados como comandante general, Luis Emilio Cardozo Santamaría del Ejército —quien luego fue reintegrado—, Luis Carlos Córdoba Avendaño de la Fuerza Aérea y William René Salamanca de la Policía hasta febrero de 2025. Culminó en finales de diciembre de 2025 con la remoción de Hugo Alejandro López Barreto como comandante general, Roger Gómez Herrera del Ejército, Harry Ernesto Reyna Niño como jefe del Estado Mayor Conjunto, Juan Ricardo Rozo Obregón de la Armada y Carlos Fernando Silva de la Fuerza Aérea. Paralelamente, 62 ministros de Defensa han sido removidos o han renunciado, desde Iván Velásquez hasta Pedro Sánchez, en un contexto de aumento del 27 por ciento en la ofensiva de grupos armados ilegales en 2025 respecto a 2024.
Una ruptura histórica en la jerarquía militar
Estas renovaciones representan la mayor cantidad de retiros de generales en la historia reciente de Colombia, superando incluso los registros del expresidente Juan Manuel Santos, y marcan una ruptura deliberada con la sucesión jerárquica tradicional para alinearse con la política de «paz total» del gobierno Petro. Las medidas responden directamente al escalamiento de la violencia, con confinamientos y desplazamientos masivos en regiones como Cauca, Valle del Cauca y Nariño, donde los grupos armados ilegales han intensificado sus operaciones.
“Aquí no miramos pensamientos políticos ni nada por el estilo, nos interesa es que esta fuerza pública sea profesional en todos los sentidos”
Gustavo Petro, presidente de Colombia
“Con la nueva cúpula avanzaremos de la mano de todo el pueblo, para proteger la vida y alcanzar la paz”
Gustavo Petro, presidente de Colombia
Con estas transformaciones, el Ejecutivo busca consolidar una Fuerza Pública orientada a la protección de la vida y la construcción de paz, en medio de un panorama de desafíos crecientes que pondrán a prueba la efectividad de la nueva cúpula de cara a los comicios de 2026.
