La representante a la Cámara por la Alianza Verde, Katherine Miranda, reveló detalles inéditos sobre las placas de mármol con los 12 mandamientos que el actual presidente de Colombia, Gustavo Petro, firmó en mayo de 2018 en el Cementerio Central de Bogotá, comprometiéndose explícitamente a no convocar una asamblea constituyente. Este hecho, que respaldaba la campaña de Petro para la segunda vuelta presidencial de ese año, ha resurgido en medio del reciente anuncio del mandatario de impulsar una asamblea constituyente en la próxima legislatura para superar el bloqueo en el Congreso, con la imagen de la firma circulando ampliamente en redes sociales.
Miranda, quien mandó a fabricar las placas a pedido del senador Antanas Mockus y ante un público que incluía figuras como Ingrid Betancourt y Claudia López, relató que Petro suscribió estos compromisos públicos que también abarcaban respetar la propiedad privada, defender el Estado social de Derecho y no ceder a la tentación de emular al fallecido Hugo Chávez. La representante, que respaldó a Petro en las campañas de 2018, cuando perdió ante Iván Duque, y en 2022, ha pasado ahora a la oposición, cuestionando duramente al presidente por este aparente contradicción.
Arrepentimiento público de Miranda
En su perfil de X (@KatheMirandaP), Miranda detalló el proceso: ella misma gestionó la elaboración de las placas en el Cementerio Central para formalizar esos 12 mandamientos como un pacto simbólico de la campaña. La anécdota cobra relevancia ante las declaraciones recientes de Petro sobre una posible constituyente, lo que ha avivado el debate político sobre la coherencia de sus promesas electorales.
«Estuve aquí, yo misma mandé a hacer esas placas en el Cementerio Central porque me lo pidió el profe Antanas Mockus».
Katherine Miranda, representante a la Cámara
«Me avergüenza y me arrepiento de haber creído en él».
Katherine Miranda, representante a la Cámara
Las fuertes palabras de Miranda no se detuvieron ahí, al expresar su desilusión total con el rumbo del Gobierno: «Qué asco y repugnancia en lo que terminó Gustavo Petro». Este episodio, respaldado por fuentes como Colprensa y el propio perfil de la congresista en X, subraya las tensiones crecientes en el espectro político colombiano, donde antiguos aliados ahora confrontan al Ejecutivo por posibles incumplimientos a compromisos solemnes grabados en mármol.

















