Hernán Cadavid, representante a la Cámara por el Centro Democrático, ha alertado sobre la zozobra que genera en los sectores empresariales de Colombia la posible alza del 23 por ciento en el salario mínimo para 2026, según un borrador filtrado de decreto que circuló en redes sociales el 28 de diciembre de 2025, publicado por Norbey Quevedo. El decreto definitivo se espera para el 29 o 30 de diciembre, con implementación a partir del 1 de enero de 2026, y este aumento se vería amplificado por los auxilios de transporte, parafiscales y nuevos recargos laborales, lo que podría impactar negativamente los costos laborales y el empleo en el país.
El salario mínimo actual es de 1.423.500 pesos, y con el incremento propuesto ascendería a 1.750.905 pesos, representando un alza de 327.405 pesos. Esta medida responde al objetivo de preservar el poder adquisitivo frente a la inflación y avanzar hacia un salario mínimo vital, tal como lo establece la Constitución, mediante un ajuste gradual con revisiones periódicas, aunque genera debate por el riesgo de pérdida de empleos debido a costos insostenibles para las empresas.
Debate político y declaraciones oficiales
El borrador ha avivado la discusión tras la mención de una meta cercana a los 1.800.000 pesos por parte de Armando Benedetti, ministro del Interior, quien adelantó un aumento superior al 16 por ciento. Por su parte, el ministro del Trabajo, Antonio Sanguino, ha defendido el decreto como una medida motivada y constitucional, basada en la comparación del salario mínimo con la canasta básica vital.
“Hay zozobra en sectores empleadores de Colombia por la posible alza de salario en un 23%. Ese monto + Auxilios de Transporte + parafiscales + nuevos recargo haría insostenible el empleo para muchos. URGE el equilibrio entre mejorar ingresos a trabajadores sin acabar la empresa”
Hernán Cadavid, representante a la Cámara
“Salario vital, ese concepto lo ponemos en el decreto, es lo que buscamos”
Gustavo Petro, presidente de Colombia
“un nivel salarial necesario para proporcionar un nivel de vida digno a los trabajadores y sus familias”
Organización Internacional del Trabajo (OIT)
La filtración ha puesto en el centro del debate la necesidad de equilibrar la mejora en los ingresos de los trabajadores con la sostenibilidad de las empresas, en un contexto donde el gobierno busca consolidar el concepto de salario vital como pilar de la política laboral nacional.
