El dólar en Colombia cerró este lunes 29 de diciembre de 2025 en $3.707,15 según la Plataforma Set-FX, registrando una caída de $8,9 frente a la TRM de $3.716,05, en medio de expectativas por el anuncio del aumento del salario mínimo para 2026 que impulsará el presidente Gustavo Petro vía decreto, tras la falta de consenso en la concertación. La jornada se desarrolló con 1.171 transacciones y un volumen negociado de 1.299 millones de dólares, influida por la debilidad del euro y la libra esterlina, el fortalecimiento del yen japonés y un sesgo negativo general en las monedas emergentes, aunque con perspectivas de entrada de divisas por un posible alza de tasas del Banco de la República, que se mantiene en 9,25%.
Durante la sesión, la divisa estadounidense abrió en $3.699,00, tocó un mínimo de $3.695,00 y un máximo de $3.754,77, mostrando una variación negativa del 0,31% en los últimos siete días y del 12,57% en el año. En las casas de cambio, se cotizó en compra a $3.693,43 y en venta a $3.817,65. Expertos de Acciones y Valores destacaron que el dólar rebotó con fuerza al inicio de la última semana del año, en una sesión dominada por ajustes de portafolio de fin de año y condiciones de liquidez reducida, tras marcar mínimos intradía por debajo de $3.700 antes de revertir el movimiento. La depreciación del peso colombiano se alineó con otras monedas emergentes, como el peso chileno debilitado, mientras el sol peruano mostró ganancias leves y el real brasileño tuvo el peor desempeño; pese al ajuste reciente, el peso acumuló una apreciación cercana al 16% en 2025.
Expectativas por el salario mínimo y contexto internacional
El anuncio del aumento del salario mínimo para 2026, proyectado en un 23% según analistas —frente al 16% pedido por sindicatos y el 7,21% propuesto por gremios, lo que podría llevarlo a cerca de $1.800.000—, genera preocupaciones inflacionarias que podrían obligar al Banco de la República a elevar sus tasas, atrayendo dólares hacia mayor rentabilidad. Adrián Garlati, profesor asistente de Economía de la Universidad Javeriana, advirtió que este incremento real, uno de los más altos registrados al descontar la inflación, impulsaría esas presiones.
«El aumento se está proyectando en 23%, que sería uno de los aumentos reales, descontando la inflación, más altos de que se tenga registro. Eso generaría preocupaciones inflacionarias y eso llevaría al Banco de la República a tener que subir las tasas y, claro, lo que hacen los dólares con esta alza es irse donde hay más rentabilidad».
Adrián Garlati, profesor asistente de Economía de la Universidad Javeriana
En el contexto internacional, las ventas pendientes de viviendas en Estados Unidos alcanzaron 79,2 puntos en noviembre, el máximo desde febrero de 2023, mientras la volatilidad semanal superó la anual y el DXY se mantuvo en un rango estrecho ante minutas del FOMC y expectativas de recortes de la FED en 2026. Las minutas del Banco de Japón revelaron debates sobre subir tasas tras el 0,75%, y para la semana se esperan datos clave como el índice PCE, ingresos y gastos de hogares en EE.UU. Garlati añadió que el dólar no subirá por la segura entrada de dólares en la economía.
«No va a subir por la segura entrada de dólares que va a tener en la economía».
Adrián Garlati, profesor asistente de Economía de la Universidad Javeriana
La jornada previa mostró una disminución del 0,01%, consolidando la tendencia de un peso fortalecido en el año pese a los vaivenes finales, en un mercado atento a las decisiones gubernamentales y globales que definirán el panorama cambiario entrante.

















