El Instituto de Ciencia Política (ICP), mediante su Observatorio Económico, publicó el informe titulado “El aumento del salario mínimo no está mejorando los ingresos de los colombianos”, en el que advierte que los incrementos al salario mínimo en Colombia no se traducen en mayores ingresos reales para los trabajadores debido a las barreras regulatorias y económicas que limitan la movilidad salarial. Según el análisis comparativo y datos salariales presentados, el salario mínimo en el país representa el 92,31 por ciento del salario mediano, una proporción que actúa como un techo aspiracional para la mayoría de los trabajadores formales, de los cuales la mitad percibe ingresos cercanos al mínimo o incluso inferiores.
El estudio destaca que, pese a los aumentos nominales del salario mínimo —del 10,07 por ciento en 2022, 16 por ciento en 2023, 12 por ciento en 2024 y 9,54 por ciento en 2025—, la inflación ha neutralizado estos avances, con tasas del 13,2 por ciento en 2022, 9,3 por ciento en 2023 y 5,2 por ciento en 2024. En términos de poder adquisitivo ajustado por paridad de compra, Colombia registra un salario medio de 364 dólares y un mínimo de 336 dólares, cifras que palidecen ante las de países como Suiza con 7.495 dólares, Dinamarca con 6.168 dólares y Singapur con 5.349 dólares.
Desigualdades globales y rigideces locales
El informe del ICP compara esta situación con la de otros países: en Estados Unidos, el salario mínimo equivale solo al 25 por ciento del mediano, mientras que en España y el Reino Unido oscila entre el 53 y 61 por ciento, lo que permite mayor movilidad salarial. Destaca además que naciones prósperas como Dinamarca, Suiza, Noruega y Singapur no cuentan con un salario mínimo decretado, sino que generan altos ingresos a través de economías libres y competitivas. En Colombia, factores como el sistema tributario, la carga regulatoria, la inseguridad y la reciente Reforma Laboral de 2025 (ley 2466), que encarece el empleo formal, agravan el problema y condenan a los trabajadores a aspirar únicamente al mínimo.
“Nos concentramos en discutir incrementos nominales, pero no en cómo generar salarios medios altos que reflejen el desempeño económico y la productividad real”.
Informe del ICP
“El trabajador colombiano difícilmente puede aspirar a ingresos significativamente superiores debido a la estructura empresarial, afectada por costos y regulaciones”.
Estudio del ICP
Hacia una economía que libere el potencial
El análisis del ICP enfatiza que la riqueza de los trabajadores no se decreta, sino que se genera en entornos seguros y competitivos que valoran el talento y la productividad. Por ello, insta a que la discusión sobre el salario mínimo deje de centrarse en porcentajes anuales de incremento y se enfoque en desmontar los obstáculos que frenan el potencial de las personas y del país.
“La riqueza de los trabajadores no se decreta; se genera en economías libres, seguras y competitivas, que valoran el talento y fomentan la productividad”.
Análisis del ICP
“La discusión sobre el salario mínimo no debería girar solo en torno a un porcentaje anual de incremento, sino en cómo desmontamos los obstáculos que condenan al colombiano a aspirar únicamente a un salario mínimo. La meta debe ser liberar el potencial de las personas y del país”.
Informe del ICP
Este informe llega en un momento clave para el debate laboral en Colombia, recordando que sin reformas estructurales profundas, los incrementos salariales seguirán siendo ilusorios para la mayoría de los trabajadores.
