Carlos Emilio Betancourt Galeano asumió oficialmente como director en propiedad de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian), en reemplazo de Luis Eduardo Llinás Chica, quien dejó el cargo tras ejercerlo de manera provisional desde el 27 de octubre de 2025. Este nombramiento se produce en un contexto de alta tensión política y representa el cuarto cambio en la dirección de la entidad durante el actual periodo presidencial.
Betancourt Galeano toma las riendas de la Dian en un momento delicado, marcado por los retos en el recaudo de impuestos, el control aduanero y la lucha contra la evasión fiscal. Llinás Chica, por su parte, no recibió el designo en propiedad y abandona el puesto después de un breve paso interino, sumándose a la lista de predecesores que incluye a Luis Carlos Reyes y Jairo Orlando Villabona, en una serie de relevos que han caracterizado la gestión en este cargo estratégico.
Cambios en medio de presiones internacionales y fiscales
La designación de Betancourt coincide con la inclusión del presidente Gustavo Petro y varios funcionarios en la Lista Clinton de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (Ofac) de Estados Unidos, lo que ha intensificado los movimientos en cargos clave del sector económico y de control fiscal. Este relevo ocurre en un escenario de incertidumbre, donde la Dian enfrenta desafíos críticos para fortalecer el recaudo y combatir la evasión, en un esfuerzo por estabilizar las finanzas públicas del país.
El nuevo director en propiedad hereda una entidad pivotal para la economía nacional, con la responsabilidad de navegar por estas turbulencias políticas y económicas, asegurando un control efectivo de aduanas e impuestos en tiempos de alta exigencia presupuestal.

















