El presidente de Colombia, Gustavo Petro, y el reconocido periodista deportivo César Augusto Londoño protagonizaron un intenso intercambio de mensajes en la red social X, centrado en el reciente anuncio de un aumento del 23.7 por ciento al salario mínimo, una medida que ha generado amplio debate sobre su impacto fiscal e inflacionario. Mientras Londoño cuestionó la coherencia del gobierno al presumir de una inflación controlada en 5.2 por ciento pero elevar el salario casi cinco veces más, Petro defendió la decisión desde una perspectiva de la economía política clásica y keynesiana, argumentando que en un contexto de oferta y producción reprimida como el colombiano, un impulso a la demanda agregada puede reactivar la economía y generar mayores ingresos fiscales.
El intercambio surgió tras el decreto de Emergencia Económica por desfinanciamiento del Estado y el anuncio del incremento salarial, con Londoño alertando sobre la falta de recursos para que la Nación, principal empleador, cubra el nuevo gasto, y comparando la situación con Venezuela, donde el salario mínimo ha caído a apenas medio dólar equivalente a 130 bolívares. Petro, por su parte, enfatizó que presupuestalmente el saldo podría ser positivo si la producción se dispara, buscando así más producción, equilibrio financiero y un mayor nivel de vida para los trabajadores, en contraposición al neoliberalismo que, según él, falsea la realidad.
Críticas y defensas en el ojo del huracán económico
La controversia, que captó gran atención en X, también involucró cuestionamientos a la sustentabilidad fiscal de la medida y la falta de consenso sindical, ya que la Central General de Trabajadores (CGT), cuya misión es procurar una nueva sociedad con trabajo decente y salarios justos, no estuvo de acuerdo. Londoño aludió a esta posición y compartió opiniones de economistas no alineados con el gobierno, mientras Petro recordó la historia del salario mínimo en Colombia, que pasó de ser el mejor de América Latina en los años sesenta a uno de los peores actualmente.
«Es muy simple Cesar Augusto, yo no soy neoliberal sino de la economía política clásica y científica. No creo en ideologías que falsean la realidad.»
Gustavo Petro, presidente de Colombia
«Su gobierno se ufana de mantener la inflación baja, 5.2 %, pero sube el salario mínimo casi 5 veces más. ¿Incoherencia o populismo?»
César Augusto Londoño, periodista deportivo
«Decreta Emergencia Económica porque el estado está desfinanciado y anuncia incremento del 23.7 % en el mínimo. El mayor empleador es la nación, ¿de dónde va a sacar la plata para pagar? No tiene dinero y su decisión Gustavo Petro es gastar más.»
César Augusto Londoño, periodista deportivo
En su réplica, el mandatario profundizó en las ideas keynesianas, explicando que un aumento de la demanda puede sacar al país del estancamiento sin disparar precios por masa monetaria excesiva. Londoño cerró agradeciendo la respuesta presidencial pero insistiendo en el ejemplo venezolano como advertencia. Este debate en redes sociales pone de manifiesto la tensión entre enfoques económicos neoliberales y las propuestas keynesianas y clásicas impulsadas por el gobierno de Petro (2022-2026), en un momento clave para la política laboral colombiana.
«En Economía clásica los precios puede aumentar por masa monetaria, pero, Keynes demostró como en oferta y producción reprimida, caso Colombia, un aumento de demanda agregada puede disparar la economía y salir del estancamiento. Presupuestalmente si la producción se dispara aumentan sus ingresos más que el pago de sus salarios, así que el saldo puede ser positivo fiscalmente. Busco, desde la óptica keynesiana más producción y equilibrio de las finanzas, con un mayor nivel de vida.»
Gustavo Petro, presidente de Colombia
«El país que más aumentó el salario mínimo fue Venezuela; hoy es de medio dólar (130 bolívares), no tengo que explicar qué pasa allá y en qué situación está.»
César Augusto Londoño, periodista deportivo
