Carmiña Villegas, reconocida empresaria, compartió en entrevistas con La Fm y Caracol Internacional, además de un crédito en Instagram, valiosas claves para decorar y acomodar la mesa en la cena de Año Nuevo, enfatizando la elegancia, la comodidad, la integración familiar y una etiqueta formal impecable. Propuso un montaje en tonos plateados y blancos que evocan nuevos comienzos, con una mesa formal equipada con cubiertos específicos como dos tenedores, dos cuchillos y una cucharita para entrada, plato fuerte y postre, junto a copas dispuestas en escalera para agua, vino tinto, vino blanco y champaña al mismo nivel. Este enfoque busca reforzar la experiencia de cierre de ciclo y reinicio con luz, orden y renovación, ideal para una cena formal de varios tiempos con platillos colombianos emblemáticos como la lechona y el tamal.
En el contexto de la temporada de fin de año, cargada de rituales y simbología, Villegas recomendó no cenar a las 6:00 p.m., pero máximo a las 10:00 p.m., evitando esperar hasta las 12:00 a.m., ya que no todos están dispuestos a amanecer. Insistió en el uso de vajilla, cubiertos y cristal reales para generar brillo y luz no solo de velas, sino de todos los elementos, rechazando enfáticamente los desechables y cualquier informalidad como comer sobre las piernas, que arruina la magia de la mesa. Para el servicio, sugirió mesas adicionales si es necesario, integrando a niños y jóvenes en la principal o en una auxiliar, promoviendo así la integración de generaciones y momentos de reflexión sobre el cierre del año y los propósitos venideros.
Consejos prácticos para el montaje y la etiqueta
En cuanto al menú, el tamal debe servirse en su hoja tradicional, mientras que la lechona requiere cubiertos adecuados. Villegas detalló que la champaña se coloca al mismo nivel de las otras copas, lo que significa iniciar la cena brindando con ella, y recordó que no emborracharse forma parte esencial de la etiqueta. El rol del anfitrión es clave: debe incentivar el diálogo y las opiniones de todos, adaptándose a las circunstancias sin sacrificar la formalidad.
«Se considera una mesa íntima para cerrar el año. Queremos que sea con todos los detalles de delicadeza, de lujo y sobre todo de mucha luz. No solamente la luz por las velas, sino la luz por el brillo de la vajilla, de los cubiertos, del cristal. Necesitamos luz para arrancar el año.»
Carmiña Villegas, empresaria (a Caracol Internacional)
«Tiene que permitir toda integración y comodidad.»
Carmiña Villegas, empresaria
Estas recomendaciones no solo elevan la cena de Año Nuevo a un ritual memorable, sino que fomentan la unión familiar en un ambiente de elegancia y reflexión, perfecto para despedir el viejo año y dar la bienvenida al nuevo con estilo y tradición colombiana.
«Esperar hasta las 12:00 a. m. para comer es muy tarde. No todos estamos en disposición de amanecer. Yo soy partidaria de cenar temprano, no a las 6:00 p. m. (…) pero por tarde a las 10:00 p. m.»
Carmiña Villegas, empresaria
«Insisto que se pierde la magia de la mesa al comer sobre las piernas, es muy incómodo.»
Carmiña Villegas, empresaria (a La Fm)
«Por favor no usen desechables.»
Carmiña Villegas, empresaria
«La champaña va a ir al mismo nivel de las copas. ¿Eso qué significa? Que vamos a empezar nuestra cena con champaña.»
Carmiña Villegas, empresaria (a Caracol Internacional)
«No emborracharse hace parte de la etiqueta.»
Carmiña Villegas, empresaria
