Una encuesta realizada por la firma W.A.A., dirigida por William Acero Arango y registrada recientemente ante el Consejo Nacional Electoral con la Resolución 12167 hace apenas tres días, posiciona al precandidato del Pacto Histórico, Iván Cepeda, como líder en la intención de voto para las elecciones presidenciales de 2026 con un 30,7 por ciento, superando ampliamente al abogado Abelardo de la Espriella, quien obtiene un 16,2 por ciento. El estudio, de tipo presencial y financiado por el propio Acero Arango, abarcó a 11.509 electores en doce ciudades principales de Colombia, incluyendo Bogotá, Pasto, Bucaramanga, Cartagena, Barranquilla, Medellín y Armenia, y fue difundida por el diario El Espectador. Sin embargo, el periodista Melquisedec Torres ha cuestionado su legitimidad, señalando opacidad en la metodología, dudas sobre la logística de una encuesta de tal magnitud y la representatividad de la muestra, especialmente al notar que el tamaño de la muestra en Bogotá es similar al de ciudades como Pasto o Bucaramanga.
La senadora María José Pizarro, quien funge como jefe de debate de Cepeda, compartió los resultados en la red social X, celebrando el liderazgo de su candidato como un símbolo de continuidad del cambio, justicia y unidad democrática. Entre las cifras destacadas, el voto en blanco alcanza un 11,8 por ciento, seguido por Sergio Fajardo con 6,7 por ciento y Roy Barreras con 6,1 por ciento. En cuanto a la identificación política de los encuestados, la izquierda lidera con 32,6 por ciento, apenas por encima de la derecha con 29,4 por ciento, el centro con 16,1 por ciento y un 21,9 por ciento que no se identifica con ninguna tendencia. En escenarios de segunda vuelta, Cepeda arrasa con un 42,1 por ciento frente al 29,0 por ciento de De la Espriella, 42,1 por ciento contra el 19,1 por ciento de Fajardo, y 44,4 por ciento ante el 15,4 por ciento de Vargas Lleras. El sondeo también incluyó a excandidatos como María Fernanda Cabal y Miguel Uribe.
Cuestionamientos a la transparencia de la encuestadora
Melquisedec Torres, en una serie de intervenciones públicas dirigidas entre otros a la cuenta @fidelcanoco, ha puesto el dedo en la llaga sobre la credibilidad del estudio. El periodista se pregunta quién es William Acero Arango, que pagó de su bolsillo una encuesta presencial de tal envergadura, y cuánto podría costar una operación de ese tamaño con más de once mil encuestados en múltiples ciudades. Además, Torres destaca la reciente autorización del CNE para W.A.A. y cuestiona cómo fue posible realizar la encuesta incluyendo preguntas sobre excandidatos como Cabal y Uribe en un tiempo tan corto desde su registro oficial.
«Atención! Nueva encuesta. Nuestro candidato @IvanCepedaCast lidera la intención de voto presidencial con más del 30% de favorabilidad. Su liderazgo representa continuidad del cambio, justicia, democracia y proyecto de unidad. Vamos por el triunfo!»
María José Pizarro, senadora y jefe de debate de Iván Cepeda
«Atentos. ¿Quién es William Acero Arango, el encuestador que – según su ficha técnica – pagó su propia encuesta presidencial con 11.509 encuestados en 12 ciudades?»
Melquisedec Torres, periodista
Estas dudas surgen en un contexto de alta polarización para la carrera presidencial de 2026 en Colombia, donde las encuestas comienzan a perfilar preferencias en un panorama marcado por interrogantes sobre transparencia y representatividad. Mientras Pizarro ve en los resultados un impulso para el proyecto de izquierda, las críticas de Torres invitan a un escrutinio más profundo de la metodología y el financiamiento de W.A.A., en un momento clave para la medición de la opinión pública nacional.
