En la entrevista del sábado en La Veintitrés con aspirantes al Concejo de la ciudad, nuestro invitado hoy es Daniel Felipe Toro Rendón, periodista con maestría en Comunicación Social y especialización en Marketing Político
- “Emprender es para valientes, si usted no es valiente, no emprenda porque ese no es un camino fácil”
- “Para salir adelante se necesita no solo conocimiento y deseo, sino unas ganas profundas de construir independencia”
- “Intento ser futbolista pero terminó en la política y aspira hoy al Concejo”
Daniel Felipe Toro Rendón es el hijo del medio de tres varones, sus padres son una profesora, Alba Lucía Rendón Álvarez y un abogado, Gerardo Alonso Toro Marín, quienes han hecho todo en la vida para darle estudios a él y sus hermanos Alejandro Guzmán Rendón y Julio Cesar Toro Rendón.
Está casado con una guajira a quien conoció un 20 de julio en Bogotá, “ella era Jefe de Prensa de una congresista de Córdoba y coincidimos un 20 de julio en un acto especial, allí nos conocimos. Siempre quise que mi esposa fuera de ojos claros, y ella tiene unos ojos verdes hermosos. Nos casamos y tenemos una bonita familia, estamos muy felices porque estamos esperando nuestro primer hijo, una mezcla de guajira con manizaleño. Al principio ella decía que hasta el baño tenía faldas, pero como somos tan queridos en nuestra ciudad, eso le ayudó a ella para conseguir amistades que le hacen pasar muy bien”. María Camila ahora se cree una manizaleña más que me acompaña a Daniel al estadio para ver a su Once Caldas.
“Estudié en una escuelita yendo hacia Neira, que se llamaba la Alto Bonito, en la vereda del mismo nombre, ahora se llama Institución Educativa José Antonio Galán, allí estuve hasta el quinto de primaria y luego en el Instituto Técnico San Rafael cursé el bachillerato”, nos cuenta Daniel, quien fue personero del Colegio y cofundador del Foro Nacional Juvenil de Política del Instituto Técnico San Rafael.
Recuerda que fue en el Colegio en donde se contactó con la política: “cuando estábamos en las clases de ciencia sociales había un profesor que yo recuerdo mucho que se llama a Julián Reynosa, ahora trabaja en el Instituto Universitario y todavía me habló con él, una persona muy inteligente, yo diría que sabia, él nos ponía situaciones polémicas del país para que opináramos. Estando en 9º, le dije, venga Profe, muy chévere y todo el ejercicio que hacemos, pero aquí discutimos y lo que hablamos solo queda para la clase; tenemos que hacer algo, le dije. Al poco tiempo nos convocó y nos dijo, vamos a hacer actividades para que podamos hablar con todo mundo y no solo en el salón de clase. Estando en 10º tuvimos la oportunidad de hacer el Foro Nacional Juvenil de Política; desde ahí comencé a trabajar en torno a la situación social, a compartir con los compañeros visiones de país; fue bien bonita la experiencia”.
La Universidad
“Entré a la Universidad de Manizales a estudiar Comunicación Social y me gradué en el 2015, y en el 2016 comencé una Maestría en Comunicación Política en la Universidad Externado de Colombia, siendo la persona más joven en ingresar a esos estudios en ese momento”. A la par de sus estudios practicaba el deporte y estuvo con la Selección Caldas de Fútbol como portero. Finalmente se concentró en lo académico, “tengo el sueño de continuar estudiando y hacer un doctorado en el momento que tengamos la oportunidad”.
Mientras estudiaba la Maestría, realizaba labores de profesor en el Colegio San Rafael, “esa institución me dio todas las posibilidades de hacerlo, trabajaba en distintos procesos: en el de comunicaciones, era profesor de voleibol, y realizaba otras actividades. Ellos fueron muy lindos conmigo, porque me tocaba ir a Bogotá cada ocho días; trabajaba los viernes hasta las seis de la tarde, iba a la casa por la maleta, comía algo y me iba para el terminal de transporte. A Bogotá llegaba sobre las cinco de la mañana, me ubicaba en un hostal y salía para la Universidad en Transmilenio. Las clases eran el fin de semana y me regresaba por tierra el domingo en la tarde porque no había plata para avión. Este trajín duró dos años”.
Relata a La Veintitrés que trabajaba casi 12 horas para poder compensar lo que no laboraba los viernes y agrega: “mis papás me dieron esa oportunidad y una mano gigante para poder estudiar esa Maestría, por eso el sueldito que recibía se los pasaba a ellos”.
El deporte
“Desde pequeño mi papá me inculcó el deporte, y me llevaba hasta El Arenillo a entrenar con el equipo de la rama judicial, que lo integraban los hijos de los abogados y de los trabajadores de los juzgados, yo tenía nueve años y entrenaba con niños de 12 y 13. Desde pequeño tuve la oportunidad de experimentar lo que era el fútbol, que ha sido mi pasión, mi gran amor de toda la vida. Cuando me casé le dije a mi esposa, hay dos cosas que tenemos qué hablar y negociar, no me puedes limitar jamás, el fútbol y la política, si tú me apoyas en esas dos cosas yo soy feliz”.
Siempre el fútbol ha estado en su vida desde pequeño y ahora, “me gusta jugarlo, amaba ir al estadio y todavía me emociona ver cuando los equipos salen al campo de juego, eso me llena el alma; y como todos los jóvenes, quería llegar a ser profesional, yo tenía un talento particular como portero y en esa posición lo he hecho muy bien, fui selección Caldas, hice parte del proceso de divisiones menores, de jugar en primera C en Manizales; divisiones menores como tal lo hice en el América de Cali, allí tuve la oportunidad de participar de diferentes pruebas y la única que no pasé fue la de altura, yo mido 1.78 y a esa edad, tenía 15 años, me decían que debería estar midiendo 1.85; yo era muy bueno, pero sin altura no tendría esa posibilidad; el personaje allá, el deportólogo, me dijo, varón de Dios dedícate a estudiar mejor”. También se probó en el Deportivo Pasto y le pasó cosa igual.
Liderazgo
Daniel Felipe dice que él siempre tuvo liderazgo, “casi todos los años en el Colegio era representante del salón, lideraba las capitanías de los equipos cuando estaba en voleibol o en fútbol. Eso es algo que se lleva por dentro, cuando llegué a undécimo me lancé como personero y fui elegido con la mayor votación de la historia, eso fue en el 2009 y después comencé a estudiar Comunicación Social en la Universidad de Manizales, porque amaba el periodismo deportivo, pero también me interesaba el periodismo político, trabajé en Todelar haciendo periodismo deportivo y en TVA hablando de temas políticos, hasta que Dios y la vida me llevaron a estudiar la Maestría en Comunicación Política y me dediqué más a ese tema”.
Pero al terminar la carrera descubrió que el periodismo no era lo suyo. “Lamentablemente uno está muy limitado, esa fue mi percepción; más que vetado, me sentí limitado, porque uno podría hablar de un determinado tema, pero no podía decir alguna cosa; dije, y esto qué sentido tiene, porque además veía como a varios compañeros en diferentes medios los regañaban porque decían algo que no se podía, que porque el dueño, que porque el otro es patrocinador, que porque ese tema… Ahí dije, por este lado no es mi camino, y mucho más cuando se trata de temas políticos, porque lamentablemente el periodismo regional está muy atado a las clases políticas, y no existe la libertad suficiente para poder manejar determinados temas, y lo digo porque así lo han vivido muchos de mis compañeros”.
Advierte que para hacer buena política se tiene que ser franco, y parte de la franqueza es decir si alguien está haciendo las cosas mal; “puede que no en todos los medios sean iguales, pero a mí eso me pasó, y no solo conmigo, sino con varios compañeros, por eso lo digo con toda tranquilidad, no sé si eso ha cambiado, pero la realidad es que eso no se pueden ocultar. Ahora, conozco otros que hacen periodismo independiente y muy bueno, pero algunos tienen prácticas que no le sirven a la democracia y mucho menos a la sociedad”.
La oportunidad de estar en política
Terminó la Maestría a finales de 2017, “justo cuando estaba comenzando la campaña para elegir los representantes de Caldas para la Cámara del 2018 al 2022. Yo tenía claro que me tenía que meter a la política para poder entender lo que había estudiado, saber cómo son las campañas, lo que se vive al interior de las mismas y como aplicar los conocimientos adquiridos”.
Dice que por esas cosas del destino llegó donde Erwin Arias, quien fue Representante a la Cámara por Cambio Radical. “No se me olvida que yo llegue por casualidad a la oficina de él, quien me dijo, pues hombre Daniel aquí no hay plata, ni puestos, ni nada, pero si usted cree en el proyecto y quiere aprender, tiene las puertas abiertas. Yo llegué a trabajar gratis, para aprender, de momento no me interesaba la plata, quería practicar lo estudiado, y conocer todo lo de las campañas por dentro, cómo se manejan, cómo se organizan, y fue así como ingresé a esa campaña”, comenta.
Durante ese periodo electoral se hizo a muchos amigos, que le enseñaron muchas cosas relacionadas con la política. “Terminé siendo el Jefe De Prensa y Comunicaciones de la Campaña, que finalmente se ganó y él me dio la oportunidad de trabajar en Bogotá durante su periodo en el Congreso como su Jefe de Prensa. Allí presentamos varios proyectos de ley, recuerdo que se sacaron 7 iniciativas adelante, hasta convertirlas en Ley. Hay una que por mi espíritu joven y por lo que nos tocó vivir, marcó la diferencia, fue la Ley de Jóvenes, la 2039 del 2020, que pretendía que todas las prácticas que realizaban los estudiantes para conseguir su grado, fueran tenidas en cuenta como experiencia laboral, porque antes eso no ocurría. También sacamos adelante la Ley 2000 de 2019, en la que se prohibía el porte, consumo y distribución de drogas y alcohol en parques, entornos educativos y escenarios deportivos. Fue muy importante porque todas esas actividades la realizaban al lado de niños que estaban jugando, con eso se le dio herramientas a la policía para que evitará que esas cosas pasaran y se respetarán los espacios de los niños y sus familias”
Este joven Comunicador Social y Periodista, que a sus 30 años tiene una especialización en Marketing Político y es Magíster en Comunicación Política de la Universidad Externado de Colombia, manifiesta que ingresó a la política por convicción, “creo profundamente que desde la política se pueden transformar las instituciones y las vidas de las personas, siempre y cuando haya gente buena haciendo parte de ese universo”.
Después de trabajar en el Congreso estuvo un año en el grupo de Comunicaciones del Ministerio del Interior;“durante ese tiempo en el Congreso y ministerio logré generar una experiencia bastante amplia en temas legislativos, que serán valiosísimos al momento de llegar al Concejo de Manizales. También estuve en el grupo de articulación de la política de víctimas del conflicto armado, es decir puede trabajar lo social y entender las políticas públicas, hasta el año pasado que ya hubo cambio de gobierno”
Terminado ese proceso, regresó a la ciudad con la convicción de que debía independizarse porque de la política no podía depender completamente, “es claro que si se pierden unas elecciones todo el mundo se desaparece y si uno no tiene nada más importante para mantenerse, no se pueden continuar los trabajos con las comunidades”.
El emprendimiento
Daniel, que vive con pasión lo que hace, expresa que “eso es un proceso de sangre sudor y lágrimas. Hay algo muy bonito en lo que hemos coincidido los empresarios y emprendedores, y es que emprender es para valientes, si usted no es valiente, no emprenda porque ese no es un camino fácil. Eso que toda la vida le han inculcado a uno de ser tu propio jefe porque vas a tener una vida más tranquila, eso no es así, cuando uno es responsable y quiere hacer las cosas bien, se estresa más por lo de uno que por lo de los demás”.
Zebër Cocina, como se llama su emprendimiento, es un restaurante donde se puede ir a desayunar, al brunch y consumir deliciosos platos fuertes a la hora del almuerzo o la comida. “Lo montamos con mi esposa, queríamos independizarnos y crear algo para generar empleo y oportunidades, trayendo una propuesta distinta en el sector de los restaurantes a Manizales; queríamos traer platos costeños que acá no existían, porque mi esposa es de La Guajira, de Riohacha. Creamos un entorno empresarial y organizacional, a través del cual entre todos se apoyan, somos una familia y es lo que estamos construyendo”.
Expresa que ha sido muy duro porque los impuestos son carísimos y no existe apoyo desde los gobiernos hacia el emprendimiento: “Lo único que brindan son capacitaciones, que no están orientadas a situaciones específicas del día a día del emprendedor y eso es lo que tenemos que cambiar, esa es una de las motivaciones que tuve yo para hacer esta campaña al Concejo; no hay quien que trabaje por los emprendedores. Hay una imagen errónea de qué los emprendedores estamos llenos de plata, y es todo lo contrario, estamos llenos de deudas, eso no lo comprenden muchos. Se les olvida que son esos Famiemprendedores y microemprendedores los que al unirse, forman una masa de empleos gigantesca que dinamiza la economía”.
Considera que su emprendimiento es una experiencia maravillosa, “difícil y fuerte, pero nos ayudó a comprender que para salir adelante se necesita no solo conocimiento y deseo, sino unas ganas profundas de construir independencia y salir adelante”. En su negocio tiene 12 empleados, todos con sus prestaciones legales, “cuando construimos este proyecto lo soñamos con la posibilidad de apoyar a la gente, generando empleo formal, lamentablemente para quienes queremos hacer las cosas bien, no hay mayores incentivos y eso lleva a la informalidad, por eso es que hay tantas personas a los que no les pagan lo debido, porque es muy difícil y complejo tener que pagar una nómina alta y que desde las instituciones no haya ningún incentivo para quienes queremos hacer las cosas bien”.
Declara que una cosa es la estadística y otra el sueño o la utopía, “la estadística dice qué del 100% de las empresas que se crean, casi el 70% son empresas de subsistencia, que fueron creadas porque había una necesidad, mas no porque haya un deseo de emprender profundo, y de cada 10 de esas empresas que se crean, 7 desfallecen y no alcanzan el punto de equilibrio durante el primer año. Las tres que sobreviven, al segundo año quedan en el mismo grupito de 10, de los que solo tres se mantendrán”, y agrega que la Red de emprendedores de Manizales y Caldas es supremamente débil, “hay muchos programas y capacitaciones, pero de incentivos claros nadie habla, por eso creo que se necesita una voz clara desde el universo político, que verdaderamente apalanque programas y proyectos que fortalezcan y le den vida a los emprendimientos”.
Finaliza sobre el tema diciendo que “los emprendedores no queremos que nos regalen nada, no nos interesa; un emprendedor quiere que cuando esté en dificultades, le ayuden, con la certeza que esa plata se devuelve, pero que ayuden a resolver mientras tanto. Por eso muere muchas empresas, porque si bien es cierto hay momentos buenos, también los hay malos y es allí cuando se requiere de esa colaboración para poder sostener una nómina o un arriendo”.
El Candidato
Por su recorrido, estudios y experiencia adquirida, Daniel se hizo a un nombre que le llevó al reconociendo de varios partidos que lo buscaron para que hiciera parte de sus listas, sin embargo él prefirió primero sondear las opiniones de varias personas y comunidades para tomar una decisión: “Yo lo que sentí cuando hice todo el análisis, es que necesitaba encontrar un espacio con organización, con orden, que tuvieras claras los parámetros y proyecciones que se tenían para la ciudad, y encontré en el Partido Conservador esos ítems que me llamaron mucho la atención. Yo estoy por la línea del doctor Jorge Hernán Yepes, que me ha tendido la mano y creyó en mí”.
Por la estructura que maneja dentro de su campaña, con profesionales de distintas áreas, pareciera más un candidato para la Alcaldía que para el Concejo, y ahí es donde se nota la seriedad de sus propuestas. “Tenemos tres líneas programáticas muy claras, porque no es que se diga simplemente Daniel Toro concejal, es que detrás hay un equipo con doctores en economía, especialistas en gestión del riesgo, docentes, universitarios especializados en ciencia y tecnología, hay gente con experiencia en el sector público, hay jóvenes que conoce muy bien los temas de comunicación política, tenemos abogados, en términos generales un grupo muy interesante y amplio de personas de los diferentes sectores que están aportando a esas iniciativas, porque queremos aportar debate, no nos interesa en ningún momento llegar a ser un bulto, o a decir suficiente ilustración, ni a ser parte de esas personas que solo llegan para hacer presencia y recibir honorarios”, dice.
Líneas programáticas
“Nuestra primera línea programática está enfocada a los emprendedores, se llama Manizales valiente, la segunda Manizales activa focalizada en el tema deportivo y la tercera Manizales futura, dirigida a proyectar la ciudad que queremos, para que la diseñemos desde ahora mismo”
Al hablar de la Manizales del futuro indica que “necesitamos construir la Manizales del futuro ahora, y para ello tenemos que pensar en ítems tan importantes como la Infraestructura, la Movilidad y el transporte público, centrada en los adultos mayores, porque si les sirve a ellos, nos sirve a todos; los niños y los adolescentes incluidos. Que tengamos vías y andenes terminados, transporte público amigable, ciclorrutas planeadas y diseñadas para que no haya peligro para nadie. Pero también piensa en las personas del campo, “debemos diseñar una ciudad para que nuestros campesinos se sientan incluidos, cuando pensamos en Manizales solo nos imaginamos Chipre, El Cable, Malatería y su zona industrial, etc., pero olvidamos que existen zonas rurales que son muy importantes para el turismo y la economía de la ciudad. Ellos no tiene vías, la gasolina está costosísima, no existe acompañamiento real de la alcaldía para que sus productos salgan a la ciudad, que ellos se vean protegidos para que no abandonen el campo”.
Alcaldía y Gobernación
“Manizales no puede seguir improvisando, por eso para la Alcaldía apoyo a Jorge Eduardo Rojas, un hombre que ya manejó la ciudad, que tiene experiencia y conocimiento de los temas. Ya improvisamos cuatro años, es el momento que lleguen personas con experiencia a las diferentes corporaciones públicas y por lo mismo para la Gobernación de Caldas respaldamos a una persona que ya tiene resultados medibles y tangibles, Luis Roberto Rivas, él tiene ese reconocimiento para devolverle la respetabilidad a Caldas ante el país”.