- “Aquí se puede ejercer el periodismo de una manera tranquila y espontánea”.
- “hay un periodismo muy facilista especialmente entre colegas jóvenes”.
Aprovechando el día del Periodista en nuestro país, La Veintitrés invitó a varios periodistas de la región para conocer, desde su criterio, si ellos consideran que en Manizales o en Caldas existen algunas amenazas que puedan interferir en el trabajo de los periodistas de la región y el estado actual del periodismo en Manizales y estas fueron sus respuestas:
Las amenazas
Para Mariela Márquez Quintero, el tema de las amenazas en Colombia tiene otra dinámica, “se mantiene como en los tiempos del conflicto armado cuando estaban en la mayor intensidad, hoy el conflicto armado está mucho más segmentado, por zonas, no es un tema general, lo que no quiere decir que no tenga sus efectos, pero eso ha hecho que el efecto de los grupos ilegales del conflicto y de muchas otras circunstancias que afectaban la profesión de Periodista haya bajado. Queda más una amenaza de las redes sociales, de lo digital, de personas que consideran que lo que se ha dicho no es, y acuden a la violencia”, dijo.
Afirmó que esa violencia, que no es alta en ciudades como Manizales o ciudades pequeñas, “vienen más del ciudadano del común inconforme con la información, o que cree que una noticia cierta para él no es, pues no le gusta”.
“En temas de violencia, hemos pasado a otra violencia, sin desconocer que en zonas en donde todavía se mantiene el conflicto armado, pues sin duda el ejercer el periodismo es muy complejo”, manifestó.
¿Coaccionados?
Para Iván Darío Goez la palabra amenaza no se ha cruzado en su camino: “Hasta ahora en los años que llevo ejerciendo el periodismo no he tenido amenazas. El único caso que recuerdo ahora es el desgraciado episodio que le costó la vida a Orlando Sierra, una situación que en su momento conoció todo el País, y que tuvo unas causas y unas razones que fueron completamente aclarados por las autoridades y la justicia”.
Goez dijo que tampoco conoce de amenazas por el ejercicio de la profesión a ningún periodista de la ciudad, “que se vea el Periodista constreñido, amenazado, coaccionado, realmente no conozco, ahora se dice que los periodistas que manejan alguna pauta del sector oficial, se pueden ver en algunos casos coaccionados para manejar una determinada noticia, la verdad a mí no me consta y tampoco me ha ocurrido, por lo que creo que si se han presentado casos, son muy aislados”.
La amenaza es económica
Duván Marín Martínez, descartó amenazas latentes de cualquier índole, “ni política ni de la sociedad civil, ni del sindicalismo o de la empresa privada; lo que sí me preocupa y podría ser una amenaza, es de tipo económico, frente a la situación laboral de los periodistas generales y deportivos, para hablar de algunos, porque de pronto se salvan los que manejan la Comunicación Organizacional, aquellos periodistas que trabajan para determinadas empresas, porque lo otro sí se nota demasiado. Donde un periodista quiera laborar en algún medio de información, tiene que pagar un arriendo para que lo puedan escuchar, y para hacerse una especie de salario en medio de la informalidad, o que le digan yo lo contrato, pero consiga usted uno, dos o hasta tres cupos de publicidad, de $ 100.000 pesos o de $ 1 millón o de $ 10 millones, y en nuestra región, difícilmente la empresa privada apoya publicitariamente, y mucho menos si es un comunicador periodista, lo que nos da para decir que esa situación económica si entristece cuando la situación por esto de las redes sociales también ha cambiado lo que es una auténtica y original profesión de Comunicador Social Periodista”.
José Fernando Garcés del Noticiero Económico Caldense, también confirmó que él no siente que haya amenazas para desarrollar la actividad del periodismo en Manizales, “desde mi experiencia personal, porque jamás he tenido ningún inconveniente para desarrollar mi profesión, conozco el caso de colegas que tampoco se han quejado de esa circunstancia”, afirmó.
Dijo que un caso muy delicado fue el de Orlando Sierra, “muy lamentable y qué tal vez marcó la historia del periodismo, pero finalmente la justicia procedió y condenó, pero con excepción de ese caso, yo digo que aquí se puede ejercer el periodismo de una manera tranquila y espontánea. Pero también digo que si no hay un periodismo bien formado, la gente no va a tener las bases para auscultar en los temas, indagar qué está pasando y tener la posibilidad de hacer denuncias, porque si no tiene esa formación, entonces no entiende el caso, y tampoco las maniobras irregulares que se estén dando para lograr algunos objetivos, por lo pronto me quedaría con eso de qué aquí hay tranquilidad para hacer un periodismo, en lo posible, lo más tranquilo que se pueda”.
Presiones
Para Reinel Llano Escobar, director de noticias en RCN Radio en Manizales, no hay amenazas, pero sí presiones: “Desde algunos entes territoriales, o de algunos funcionarios públicos, y no en las actuales administraciones, pero si en el pasado, porque a veces se publican cosas que a ellos no les gustan, y hacen la llamadita al gerente de una estación radial, o de un periódico, quejándose del Periodista”. Dijo que algunos creen que por dar una pauta tienen la potestad de decir que se puede o no publicar e insistió, “amenazas como tal y de muerte por lo menos a nosotros no nos ha pasado, pero las presiones no faltan”.
Los retos
Olga Caro, directora de noticias den Caracol Manizales, habló de los retos para ejercer el periodismo ahora, “hay uno muy importante, las redes sociales y la tecnología, una herramienta actual y necesaria, sin embargo, también se genera una situación difícil en el momento de informar con ética, corroborando y por supuesto sin entrar a generar polémica, qué es lo que se genera muchas veces a través de estos medios; el desespero, el afán de generar tendencia, de sacarlo viral, de pronto de llegar a más personas; obtener ese alcance del que tanto hablan, hace que las personas no contrasten la información y se queden con una sola opinión y saquen rápidamente esa información, sin hacer lo que nos han enseñado, que es buscar la verdad. Buscar si en verdad esta información que nos está llegando a través de redes sociales, de cadenas de WhatsApp, es cierta, eso es algo que debemos hacer, tomar un tiempo, respirarían. Por ahí lo dicen mucho en los medios de comunicación, que es mejor ser chiveado y no rectificado, porque una rectificación puede hacer más daño que el haber lanzado la chiva.
Preguntados por cuál es el estado actual de esta profesión en nuestra ciudad, esto dijeron:
Para Mariela Márquez, el periodismo en Manizales, Colombia y El Mundo hoy tiene una nueva dinámica: “la dinámica de la tecnología y la informática, dinámica que no nos tocó a los periodistas de la década del 80 o 90. Las tecnologías han aportado, porque agilizaron el ejercicio periodístico, lo han apoyado y reducido sus complejidades a quienes no nos tocó esa tecnología. Me parece que la tecnología digital ha aportado mucho, porque facilita recursos, información, lo facilita todo, pero también nos hemos alejado del ciudadano de pie, que no hace parte de las redes sociales, y que en ciudades como Manizales, que es de una población más adulta, se nota mucho más esa problemática del ciudadano que no tiene Red o no tiene donde colocar una queja, ni la agilidad de un celular o un computador”.
Indicó que ve cierta distancia, pero que no se puede culpar de ello a la tecnología, ni al Periodista, ni al ciudadano, y agrega, “miremos cómo queda desprotegido el ciudadano, nos hemos perdido mucho de contar historias, las redes sociales cuentan muchas historias, tic toc, las denuncias, los memes, son historias muy cortas, pero si se requiere, sin que sean notas muy largas, de quién cuente esas cotidianidades y realidades del ciudadano del común, para quien años atrás nosotros éramos fundamentales, en eso nos hemos perdido un poco”.
Iván Darío Goez consideró que el periodismo de Manizales no es diferente al de otras ciudades del país, “porque está relajado, rodeado de las mismas situaciones, dificultades y expectativas, atravesamos una situación compleja y difícil en cuanto al tema salarial, la verdad es que no hay una protección en este momento de tipo legal como existió cuando se tenía la famosa tarjeta del Periodista que declaró inexequible la Corte Constitucional en su momento, que era el arma que teníamos, para reclamar mejores derechos, para tener acceso a una vivienda.
Contó que ha habido algunos intentos por llevar al Congreso de la República un proyecto que llene estos vacíos, que supla las falencias y carencias que hoy se tienen.
Olga Caro, Periodista de Caracol Radio, hizo un análisis dentro de la profesión del comunicador social y Periodista en el Eje Cafetero, puntualmente Manizales: “uno de ellos es que nos hemos encontrado varias generaciones y primero tenemos que agradecer a esos periodistas que han venido abriendo caminos, y lo más interesante, a través de las nuevas tecnologías tratan de seguir vigentes, porque muchos no están en medios de comunicación grandes, sino con sus propios emprendimientos, lo que es muy importante, los de la mitad, pensaría que somos los que ahora estamos en ejercicio en diferentes medios, que también hay algunos medios propios, pero se está aplicando lo que se conoció desde la academia, y el conocimiento que nos da el día día de acuerdo con las necesidades de comunicar, que siempre nos enseñará”.
También hablo de las nuevas generaciones, “me parece muy interesante, porque están implementando nuevas tecnologías, creen mucho en el periodismo digital, y en nuestra ciudad pasa algo curioso, La Universidad de Manizales en el periodismo deportivo, muchos medios de comunicación tienen periodismo deportivo, que me parece muy bueno porque recordemos que en Manizales se han dado grandes periodistas en este campo, y no se pierde, sigue como esa chispita en el corazón para todos ellos y me parece muy interesante, así que es algo que nos está uniendo en este momento”.
Duván Marín afirmó que nuestro periodismo es muy similar a lo que ocurre en el resto del país, “hay un periodismo muy facilista especialmente entre colegas jóvenes, que no escriben, que no redactan, e improvisan demasiado ante cámaras o en la radio al aire. De pronto se salvan los de la Prensa escrita porque tienen más tiempo de corregir, de hacer una crónica, un reportaje, o una entrevista en mejores condiciones, pero inclusive algunos cometen errores de ortografía que es lo que uno, con los años que lleva, más siente y le preocupa porque hacia el presente y el futuro, la situación es ese sentido no la veo bien clara”.
Reynel Llano considero que tenemos un periodismo sano, “como el que se ejerce desde el periódico La Patria, Caracol o RCN, pero si miramos con mucho detenimiento lo de las redes sociales, ahí debemos tener un máximo cuidado, porque hay mucha desinformación que es en lo que a veces caen todos los medios de comunicación, ven en algunas redes sociales o en un grupo de WhatsApp alguna noticia, que a lo mejor les interesa y la ven atractiva, y sin corroborar le dan pleno crédito, aunque no es una constante. Nosotros en RCN somos prudentes y nos tomamos el tiempo para confirmar la noticia, pero en términos generales en Manizales hay un periodismo bueno”.
Garcés por su parte sostuvo que tiene la convicción de que la formación del Periodista comienza por él mismo, “su formación académica, de valores, cosas que no se inculcan en una universidad, por eso desde ese punto de vista debo decir que si encuentro un vacío de formación de valores y académica, en muchas de las personas que ejercen el periodismo en la ciudad, debemos decir que esa generación nueva está saliendo de la Facultad de Comunicación”.
Advirtió que son muchachos que no los indujeron a prepararse motu propio, “para consolidar su formación académica, para tener la oportunidad, con esa buena formación académica, de abordar el análisis de los diferentes temas que van a procesar, para llevarlos a audiencias, es una parte delicada. Pasa en los jóvenes que están saliendo, y pasa en la generación de periodistas ya con algunos años de experiencia, puede ser una oportunidad para invitar a los colegas, a que le pongamos cuidado a esta parte para animarse a consolidar lo que le dejaron de la universidad. Ese es un aspecto que lo tratamos mucho en las tareas gremiales, procuramos que esa formación académica sea aprovechada al máximo, pero creo que falta mucho, hay que leer, estar al pie de la cotidianidad de la ciudad, de la región, del país, del mundo, para, partir de ahí, tener una visión global y con base en esa visión global, procesar textos que van a ir a las audiencias”.
Jorge Hernán Botero director de La Patria, dijo que ve un periodismo con más argumentos producto de la llegada de las nuevas tecnologías, capaz de asumir los nuevos retos y descartó que existan amenazas para ejercer la profesión del periodismo en la ciudad.
Finalmente, para Eduardo Aristizabal, periodista Manizaleño radicado en Medellín, el verdadero periodismo está bien en Manizales, Colombia y el mundo, pero advirtió que “hay confusiones porque el periodismo tiene su principialistica, su preceptiva, su filosofía, sus mandamientos y quien cumple con eso, hace periodismo. Cualquier comunicador no tiene que ser automáticamente periodista, hay muchas confusiones con tanta nueva herramienta que hay, sobre todo en la virtualidad, muy útiles para el Periodista en su profesión, en la ejecución de su labor, pero no quiere decir que quien domine y quien maneje muy bien esa herramienta, ya automáticamente es Periodista”.
Dice que los periodistas deben cumplir con esos principios, con base en la información, la opinión, la educación, la distracción, y las campañas, pensando siempre en la sociedad. “Debemos tener bien presente que partimos de la verdad cuando informamos, quien emite erróneamente mensajes falsos, no está haciendo periodismo y quien emite conceptos sin argumentar, no puede estar haciendo periodismo, porque el periodista tiene que entender que la opinión es subjetiva, y por eso se tiene que argumentar”, manifestó.
Recordó que en Colombia por una jurisprudencia de la Corte Constitucional del siglo pasado, el periodismo aparece como un oficio, pero esperas que “es imposible porque hay una sutileza, porque una cosa es el derecho a informar y comunicar y otra cosa el verdadero tratamiento de esa información, que sea de interés general, no particular, ahí está el detalle. Si hablamos que es un derecho fundamental, me pregunto, y luego la salud no es un derecho fundamental? Porque según eso, también tendríamos derecho a recetar y curar?”