Literalmente en la calle quedaron dos adultos mayores y una madre soltera con sus dos hijos, al incendiarse la casa que habitaban

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Los damnificados piden ayuda de las autoridades pues no tienen a quien más acudir.

Lo hechos se registraron antes del medio día en una edificación de tres plantas ubicada en la Calle 16 con Carrera 14 del barrio Las Américas, cuando Esperanza Salazar se preparaba para la hora pico de su jornada de trabajo en el Palacio del Pandebono, un establecimiento comercial ubicado en la carrera 21 donde le pagan un jornal por día laborado. Estando allí recibió la llamada de su madre informándole que la casa se incendiaba.

La oportuna acción de los bomberos evitó que el fuego consumiera todo el edificio, pero las dos primeras plantas quedaron en ruinas. Testigos dijeron a La Veintitrés que en el primer piso había un almacén aun depósito donde vendían hierbas e imágenes religiosas, mientras que en el segundo los propietarios del mismo atendían al público. El

tercero lo tenía en arriendo Esperanza y allí vivía con sus dos hijos y sus abuelos, uno de ellos en condición de discapacidad.

Las llamas comenzaron en el primer piso y aun se desconoce qué las originó. Los abuelos de Esperanza lograron sacar a tiempo a sus dos hijos menores de 7 y 12 años de edad.

El incendio se inició en el primer nivel del inmueble, propagándose rápidamente hasta el tercer nivel debido a las altas temperaturas. Sin embargo, gracias a la rápida intervención del Cuerpo Oficial de Bomberos, se evitó que las llamas se expandieran a las viviendas vecinas.

Las autoridades están llevando a cabo una evaluación estructural del edificio afectado, además de proporcionar apoyo psicosocial a la familia residente en el tercer nivel. Las causas del incendio están por establecer.

En cuanto a las consecuencias personales, se reportó una persona con quemaduras de primer grado, quien no requirió trasladoa centro asistencial.

Al caer la tarde La Veintitrés habló con la joven Esperanza Salazar, quien en medio de su angustia relató que no tenían para donde ir, ni qué camino tomar, pues el ingreso a los pisos que habitaban quedó totalmente restringido.

Explicó que después de la intervención de los bomberos les fue brindada atención psicológica “pero nadie de la alcaldía ha dicho nada acerca de nosotros”. La mujer, de 31 años, hizo un llamado angustioso a las autoridades para que les ayuden a reubicarse.

Si alguna persona desea brindarle apoyo a ella y su familia la puede contactar directamente al móvil 3113464351

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