El Congresista defendió, la libertad de prensa, dijo que los fallos judiciales no se pueden interpretar como golpes de estado y manifestó que el presupuesto del próximo año será de 511 billones
El presidente del Congreso en su intervención en el marco del ´XIX Conversatorio de la Jurisdicción Constitucional: Promesas y Garantías`, expresó que “hay tradiciones constitucionales que son referentes en esa adaptabilidad vital de la norma constitucional, como es el caso de la tradición norteamericana que en sus 228 años de vigencia nunca ha sido reformada, y solo ha tenido 27 enmiendas
Y con eso, interpretando con inteligencia y sentido de sociedad, han logrado afrontar los requerimientos que les ha planteado la convivencia económica tecnológica social y política de una nación tan vital como la norteamericana”, dijo
Sostuvo que para el caso colombiano “la constitución del 86 durante los 104 años que estuvo vigente fue reformada 74 veces y la Constitución del 91 en sus 33 años de vigencia ha sido reformada 55 veces, modificando 108 artículos, como lo dije en mi discurso de posesión como presidente del Senado de la República no hemos tenido tiempo para aplicarla porque hemos estado ocupados reformándola”.
Dijo el parlamentario que “nuestra Constitución nos dice, que somos una democracia donde hay alternancia de poder, donde hay ramas del poder público definidas claramente, donde protegemos la propiedad privada, donde hay un ejército que porta las armas de la República para proteger nuestra vida, honra y bienes, donde los fallos de la justicia se respetan, donde los jueces son independientes, donde las leyes se discuten en el Congreso libremente, sin presiones, sin descalificaciones y sin señalamientos; donde los poderes públicos trabajan armónicamente en beneficio de los ciudadanos, donde se protege a la prensa sin importar si esta nos critica o investiga.
Siempre he pensado que la prensa libre es pilar de la democracia, por eso en mi discurso de posesión como presidente del Senado dije que la prensa tiene las puertas abiertas, tenemos que protegerle y garantizarle el cumplimiento de su importante labor informativa, de análisis y de investigación”, Agregó
Recordo además que Colombia es un país “donde los sectores productivos pueden unirse en gremios que defiendan sus intereses sin que nadie entienda que están conspirando por defender legítimamente sus negocios; donde se estimula la economía de mercado, donde se respetan las minorías, donde las regiones tienen competencias que no pueden ser ignoradas, donde el presupuesto público se distribuye con criterios de equidad sin importar si son territorios amigos o enemigos los que solicitan dichos recursos y donde prima la responsabilidad fiscal, donde hay confianza legítima y los contratos se respetan y no se alteran por ideologías o sesgos coyunturales, donde el quebranto de la Ley es judicializado y no se promociona la impunidad, donde un fallo adverso por parte de la justicia no se interpreta como un golpe de estado y donde se propicia que la institucionalidad actúe sin sentir que nos persigue cuando hay una decisión adversa a nuestras opiniones. Esto y mucho más es lo que dice nuestra Constitución, eso es lo que debería estarse cumpliendo”.
Una constitución con muchas miradas
Advirtió que nuestra Constitución fue el fruto de muchas miradas, “difícilmente se encuentra un ejercicio Constituyente más rico e integrador, allí había desmovilizados, sindicalistas, poetas, historiadores, sociólogos, indígenas, juristas, intelectuales economistas, periodistas y una gama de referentes de todas las tendencias políticas del país, la fragancia de ese pluralismo se siente en todas y cada uno de los artículos de nuestra Constitución, ese esfuerzo Constituyente nos entregó un documento en donde nos sentimos definidos, interpretados, proyectados y encausados como sociedad, en los artículos de ese documento se encuentran nuestras esperanzas, nuestros anhelos, nuestras frustraciones, nuestros desafíos y nuestras fortalezas”.
Manifestó que este documento no fue el fruto de un líder iluminado que se las sabía todas, sino la consecuencia de una gran concertación de miradas, pensamientos e historias que se tradujo en un camino que podemos recorrer como país, sin sobresaltos, ni convulsiones.
Un Camino cierto y seguro
“La institucionalidad consagrada en nuestra Constitución, es un camino cierto y seguro; la Constitución pretende que el devenir social encuentre un marco en donde todos nos sintamos que tenemos garantías para desarrollar nuestras vidas, en medio de la diversidad de los demás, un marco que garantiza que no se oirá una sola voz, que no se impondrá una sola versión y que no se desautorizan las posturas que no coincidan con las que se encuentran coyunturalmente en el poder. Esa Constitución en últimas, le concede a cada ciudadano un marco de libertades y derechos que lo protege contra el unanimismo, contra la verdad revelada, contra el mesianismo, contra la perpetuidad del mando y contra cualquier embestida desde el poder con el fin de invalidar la posición parlamentaria de ese momento”.
La Corte Constitucional es garantía para Colombia
“Hay que ver como el Congreso, los tribunales, la prensa, los gremios, la autoridad electoral y cualquier otra manifestación de poder, se vuelven simples escenografías que decoran la arbitrariedad en medio de la cual se malvive.
Acá tenemos una institucionalidad sólida, que ha enfrentado los desafíos que le plantearon, por ejemplo, los narcotraficantes o los grupos insurgentes y todas esas mafias que pretenden subyugar a los poderes que los combaten, y hemos salido adelante dejando en el camino, eso sí, grandes hombres, a magistrados a candidatos presidenciales, a periodistas, a policías, militares y centenares de ciudadanos que desde los distintos ámbitos entregaron sus vidas en defensa de esa institucionalidad que hoy debemos defender nosotros.
La Corte Constitucional es una garantía para los colombianos, el país los mira con confianza, con admiración y con respeto, ustedes son el muro de contención contra los excesos, ustedes son la frontera de la justicia que enfrenta la fuerza, la arbitrariedad y el desbordamiento con que algunos poderes actúan, ustedes son la mesura y la seriedad en medio de las discusiones altisonantes y arbitrarias”.
Protección para la corte
Indicó que “los colombianos debemos cuidarlos, mantenerlos alejados de la descalificación y los señalamientos, no permitir que los metan en el juego de la política, Colombia los necesita en ese entorno virtuoso de interpretaciones, de argumentos, profundidad, entereza, firmeza, sabiduría y patriotismo con el que se encuentran.
Cuando ustedes se pronuncian, el país debe acatar con respeto, no hay otro camino, el Congreso de la República es consciente de eso, ha sido es y será aliado institucional de la justicia, así lo exige la Constitución y así lo hemos hecho nosotros, estaremos atentos a las discusiones manifestaciones y conclusiones de este importante foro, porque sabemos que es en estos ámbitos en donde se encuentran las luces para abordar nuestro futuro con mayor claridad y esperanza”.
El Presupuesto Nacional
El presidente del Senado manifestó que el gobierno nacional escogió el camino más empedrado y largo para sacar adelante su presupuesto, “le propusimos un consenso con el Congreso de la República, lo mismo que hemos hecho con muchos proyectos de Ley, consensuar para ponernos de acuerdo; les propusimos sacar el presupuesto, luego discutir la reforma tributaria o Ley de financiamiento y finalmente el presupuesto adicional, hoy estamos en un limbo medio desconocido porque es primera vez que se presenta en la historia reciente de Colombia; el Presidente lo expedirá por decreto como dice la norma, pero esto genera ruidos en los mercados internacionales y nos mete en un camino desconocido, para entonces en un ambiente que no será nada agradable, discutir esa reforma tributaria y el presupuesto adicional. Nosotros ofrecíamos el camino más sencillo de sacar todo en este año, por supuesto queremos, y por eso rechazamos esos 12 billones, el congreso no puede aprobar a ciegas una reforma tributaria, tiene que debatirla, discutirla, escuchar las comunidades, las fuerzas vivas, el Banco de la República, el Comité de la regla Fiscal, y eso lo vamos a hacer con tranquilidad, posiblemente entonces no tendremos presupuesto adicional para el año entrante y el presupuesto quedará en los 511 billones, porque hay 12 que no están financiados y por lo mismo hay que recortarlos”, dijo.
