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Por ESTEBAN JARAMILO OSORIO  

“Dr. Ochoa Uribe, ¿qué trae usted a Manizales?”, le preguntó Jaime Escobar, haciendo de improvisado periodista de camerino, carrera en la que no prosperó, al afamado entrenador, cuando estaba al frente de Millonarios. -“Un equipo de futbol”, respondió.

Afloró entonces la chispa de “banano”, como todos lo llamábamos.
 
 –“Qué bueno, no pensé que fuera un circo”.
 
“Banano”, mi amigo.  Ingeniero agrónomo, apasionado por el futbol. Portero “tanga” de la época en el futbol recreativo. Nada tapaba. Conversador genial. Mamador de gallo, billarista, coqueto en su juventud. Empresario y político exitoso, entrevistador y narrador.
 
Transmití con él y con Javier Giraldo Neira, ya ausente, inspirador con su habilidad oral. Personaje “Banano”, con su gracia y espontaneidad al opinar.
 
Alternamos reportaría en la gramilla y hasta un partido contra Millonarios, en ausencia del locutor oficial, Jaime Olaya Teheran, transmitió, arrojado y decidido.
 
“Va a sacar la Coneja Acosta”, decía en su relato. “¡Atención! Va a sacar la coneja Acosta. Lo hace de manotazo con la pierna izquierda”, entre el jolgorio de la tribuna que lo escuchaba con hilaridad.


 Admirador de Walter Gómez, un uruguayo, para muchos el mejor futbolista extranjero que vistió el uniforme blanco del Once Caldas.
 
De Nicolás Lobatón, otro talentoso, con quien compartió amistosas charlas nocturnas en bailaderos de la ciudad.
 
De la “coneja” Acosta, un portero largo y flaco, de los años 70, que, en épocas de penurias futbolísticas del Once Caldas, brilló con calidad.
 
Resaltaba, en su juventud, su espíritu fiestero. Recorría las calles en la noche buscando aventuras y placer con el silencioso visto bueno de “Macana”, don Jaime, su padre, tan dicharachero como él.
 
Con el tiempo cambió. Se fue de los micrófonos, tras un paso fugaz. De la vida alegre también. Se dedicó a estudiar. A trabajar. Ocupó destacados cargos públicos, formó una familia maravillosa y se estabilizó como personaje en la ciudad, aunque siempre influido por el sentimentalismo que produce el futbol del ayer.
 
 Murió banano


 Un día cualquiera, nos volveremos a encontrar, para tertuliar con peculiar pasión, con el Pecoso Castro, con “chalo” González, un destacado futbolista de Manizales, que jugó en la selección.
 
Con Jairo Gómez Chica, Bernardo Villegas, Oscar Gómez Ceballos, “la Coneja” Acosta”, Giraldo Neira y “Caín”, todos con pasado en el Once Caldas. Algunos ya jugando sus partidos en el terreno celestial. Esteban J.
 
Aquí estoy. De milagro. Uno a uno se marchan mis amigos. La foto que ilustra este escrito, una noche de tertulia, en la finca de “Caín”*. *Banano*, *Caín*, *Jairo Gómez*, perduran en el recuerdo, pero ya no están. El otro, “pocillo” López futbolista de renombre nacional. *Esteban Jota*.

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