En medio de la controversia internacional por derechos de propiedad intelectual, la cadena española Frisby España S.L. anunció una transformación completa de su identidad visual, tras cuestionamientos por parte de la empresa colombiana Frisby S.A. BIC.
…
La disputa entre la firma colombiana Frisby S.A. BIC y Frisby España S.L. dio un nuevo giro esta semana, luego de que la compañía con sede en Europa anunciara la modificación total de sus elementos gráficos y visuales. Esta decisión se produce después de que la empresa colombiana, originaria de Pereira, advirtiera públicamente que no ha otorgado franquicias, licencias ni derechos de operación en el continente europeo.
Desde Colombia se denunció que Frisby España utilizaba sin consentimiento elementos distintivos como el nombre comercial y una figura similar al icónico “Pollo Frisby”, elementos asociados históricamente con la marca nacional.
En un escueto comunicado, Frisby España informó que tomará medidas inmediatas para renovar su imagen corporativa, con el fin de evitar posibles acciones legales. Aseguran además que no tienen vínculo alguno con la cadena colombiana.
Entre las acciones anunciadas por la empresa española se incluyen:
- La modificación del logotipo institucional,
- La eliminación del color amarillo como tono principal,
- La creación de una nueva mascota con una propuesta visual distinta.
…
Según Frisby España, estos ajustes buscan responder a una estrategia de posicionamiento más refinada, acorde con los valores y las expectativas del mercado europeo. En sus propias palabras, el objetivo es “proyectar una imagen claramente independiente y coherente con los códigos culturales y visuales del entorno local”, en un escenario marcado por la alta competitividad del sector de alimentos y comidas rápidas.
Este episodio pone nuevamente sobre la mesa la importancia de la protección de la propiedad intelectual y el resguardo de las marcas en mercados internacionales. Aunque la firma española se anticipó a las consecuencias jurídicas, todo indica que la discusión no ha terminado. La defensa de los derechos empresariales y la reputación de marca sigue siendo un tema de alta sensibilidad en el comercio global.