En Cenicafé se desarrolló un espacio de diálogo entre instituciones y gremios productivos para abordar los desafíos de seguridad en zonas rurales del departamento.
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Representantes de los gremios cafetero, ganadero y citricultor, junto a las alcaldías de Chinchiná, Palestina y Neira, la Secretaría de Gobierno de Caldas y las fuerzas militares y de Policía, participaron en un foro desarrollado en Cenicafé con el propósito de definir estrategias conjuntas que fortalezcan la seguridad en las zonas rurales del departamento.
El espacio fue convocado por el Comité de Cafeteros y el Comité de Ganaderos de Caldas, con el objetivo de intercambiar perspectivas, coordinar acciones y consolidar un trabajo articulado que responda a los desafíos de seguridad en el centro sur del departamento.
El presidente del Comité de Cafeteros de Caldas, William Giraldo Grisales, destacó el valor de estos espacios de diálogo. “… Estos encuentros permiten dialogar, entender posiciones y, sobre todo, ver que nuestras autoridades están trabajando de manera articulada”.
Giraldo subrayó que lo más significativo fue escuchar de parte de la Policía y el Ejército su disposición para atender las zonas rurales, donde los retos en seguridad son mayores. «Afortunadamente, en Caldas la situación no es tan compleja como en otros departamentos, aunque sí se presentan dificultades en algunos municipios”, agregó.
Desde la Policía del Departamento de Caldas, el teniente coronel Salvador Iván Mesa Cerón, comandante Operativo, resaltó la importancia del foro como mecanismo de contacto directo con las necesidades del territorio.
“Este espacio nos ha permitido conocer de primera mano las diferentes perspectivas y preocupaciones en materia de seguridad. Desde la Policía Nacional, y en articulación con el Ejército Nacional, mantenemos una coordinación permanente para brindar acompañamiento efectivo a los distintos sectores del territorio. Estamos preparados para atender incluso aquellas zonas apartadas del casco urbano, que requieren una logística especial para el acceso y la presencia institucional.”
El oficial invitó a los ciudadanos y a los representantes gremiales a mantener una comunicación constante con los comandantes de estación, de distrito y con unidades especiales como el GAULA. Además, recordó las líneas 123 para emergencias generales y 165 para reportar casos de extorsión o amenazas.
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Voces del sector rural
Durante el foro también se escucharon voces del sector productivo, como la de Felipe Rivas Montoya, caficultor del municipio de Chinchiná, quien planteó inquietudes relacionadas con la seguridad en época de cosecha.
“Una de nuestras principales preocupaciones es la seguridad. Nos preguntamos cómo puede el Estado brindarnos garantías, tanto en las áreas rurales como urbanas. En los últimos tiempos hemos enfrentado muchos problemas: denuncias, llamadas sospechosas, atracos, especialmente cuando los productores van a reclamar su dinero en efectivo en bancos o sucursales de las cooperativas. Por eso consideramos fundamental comunicar a las instituciones del Estado lo que realmente necesita el caficultor en esta región.”
El productor resaltó la importancia de la articulación entre gremios y autoridades. “Es una gran noticia saber que en Caldas estamos unificando esfuerzos. Si cada institución aporta, podremos consolidar un gran grupo que represente a los agricultores y caficultores y que lleve sus necesidades de forma clara ante las autoridades.”