Desde Barranquilla, para La Veintitrés Manizales, este 23 de octubre de 2025, en la mañana, se registró un hecho que alteró la concentración del Atlético Junior: Teófilo Gutiérrez insultó a un periodista y le lanzó un gesto cuando trataba de subir al bus que lo llevaría al aeropuerto para enfrentar al América, en una escena que hizo vibrar la antesala del viaje y de la próxima contienda. No sólo le gritó “sapo hp” al profesional, sino que la tensión se dejó sentir en el entorno del hotel y a lo largo de la ruta hacia la salida rumbo a Palmira para el partido de la Liga BetPlay II-2025. El encuentro siguiente entre América de Cali y Atlético Junior está fijado para el 24 de octubre de 2025 a las 8:10 p.m. hora de Colombia, en el Estadio Francisco Rivera Escobar de Palmira, un duelo que se avecina cargado de atención tras lo sucedido.
Este episodio se despliega en un marco de antecedentes y controversias que han rodeado a Gutiérrez. En 2023 fue sancionado por una palmada en las nalgas a una colaboradora del Deportivo Cali durante un partido frente al Tolima; Dimayor lo calificó como una falta supremamente grave y le impuso una suspensión de cuatro fechas y una multa. En agosto de 2025 surgió una denuncia por presuntas amenazas de muerte presentada ante la Fiscalía, proceso que finalmente fue archivado por no configurarse delito. Además, en 2018 el delantero afirmó que no fue convocado a la Copa Mundial de la FIFA 2018 porque “le pidieron algo a cambio” para ir al mundial. En este contexto, la polémica que rodeó la concentración de Junior el martes se suma a un historial de declaraciones y episodios polémicos que condicionan la prensa y la relación entre el jugador y los medios. En paralelo, también se supo de una denuncia de préstamo en agosto de 2025 por unos 180 millones de pesos, proceso archivado, que añade otro capítulo a la controversia alrededor de la figura.
Reacciones y detalles de lo sucedido en Barranquilla
«Así tratan los jugadores de Junior a los periodistas. Ni hablar de lo que dirán y harán otros.Teo viene y me hace (emoji) y me dice “sapo hp”.» – Sergio Vargas Cuesta, periodista
Por su parte, Teófilo Gutiérrez ha reaccionado con distintas versiones a lo ocurrido. En referencia a la convocatoria al Mundial, afirmó que “le pidieron algo a cambio” para ir al mundial, una declaración que ha trascendido entre las evaluaciones públicas y la atmósfera de la negociación. En otro momento, el delantero señaló que podría haber habido más controversias en su entorno, afirmando que “cualquier día me encontraban con la boca llena de moscas”. Estas expresiones forman parte de la narración que acompaña el episodio de Barranquilla y que, junto a las declaraciones de la prensa, la consolidan como un tema de interés para seguidores y críticos del fútbol colombiano.
Todo ello se enmarca dentro de un historial de antecedentes que aportan contexto a la controversia. En 2023 la sanción por la palmada fue vista como una falta grave por Dimayor, y la sanción incluyó la posibilidad de reiteraciones en el comportamiento del jugador. En 2025, además de la denuncia por amenazas que fue archivada, se confirmó la existencia de una denuncia de incumplimiento de préstamo por una suma cercana a 180 millones de pesos, también archivada. A la luz de estos hechos, la concentración previa al partido frente al América de Cali adquirió una relevancia extra, pues cerró con un incidente que podría influir en la percepción pública y en la evaluación disciplinaria que podría aplicarse en el entorno de la Liga BetPlay.
El choque entre América de Cali y Atlético Junior, que se disputará en Palmira este 24 de octubre, a las 8:10 p.m., concentrará toda la atención en el desempeño de Gutiérrez y en las posibles repercusiones disciplinarias que pudiera generar este suceso. La cita en el Estadio Francisco Rivera Escobar, en la ciudad de Palmira, sumará una nueva página a la narración de una temporada marcada por incidentes y debates en torno al comportamiento de figuras destacadas del fútbol profesional colombiano.
















