Un automóvil negro en Bogotá apareció con mensajes escritos en su carrocería y se volvió viral en TikTok, desatando un intenso debate sobre daño en bien ajeno y las posibles sanciones que podría acarrear. La identidad del propietario no fue publicada, y la difusión inicial se originó en la cuenta de TikTok @pandita100913, que compartió un video que muestra el coche y las señales pintadas. Aunque no hay una declaración oficial sobre el motivo de los mensajes, la interacción de la persona dueña en los comentarios y la publicación de un video posterior mostrando el vehículo rayado dan cuenta de una situación que escaló rápidamente en las redes sociales.
Entre los elementos que rodean el hecho también destaca la presencia en el parabrisas del usuario de Instagram @thommy_torres, identificado por quienes comentan como supuesto infiel. En respuesta, el dueño del automóvil escribió en TikTok la frase «Quería ser famoso pero no de esta manera 😂» y luego publicó un video mostrando el coche rayado con la descripción «Mi pobre nene, víctima de la loca». Las reacciones en la red han incluido especulaciones sobre si se trataría de una estrategia publicitaria, así como comentarios sobre la infidelidad y la gestión de las emociones. Diversos usuarios han recomendado buscar terapia y apoyo emocional para evitar daños a la propiedad y posibles consecuencias legales.
Subtítulo
En el marco legal colombiano, rayar un vehículo ajeno implica responsabilidad civil y puede constituir delito de daño en bien ajeno. Las penas previstas para este tipo de conducta oscilan entre prisión de uno a cinco años y multas de entre cinco y veinticinco salarios mínimos legales vigentes, dependiendo de la finalidad y las circunstancias. Además, la reparación del daño debe asumirla la persona responsable, con costos que pueden variar desde una simple limpieza hasta una pintura total del vehículo, según la extensión del daño y el tipo de escritura realizada en la carrocería. En el contexto de Bogotá, la conversación también ha abarcado opciones de reparación y las posibles cargas financieras asociadas a recuperar el estado original del automóvil.
Para quien esté considerando las consecuencias de este tipo de actos, también aparecen referencias sobre apoyo emocional y tratamiento de conflictos. En la capital colombiana se mencionan rangos para la terapia, con costos que pueden ir desde 70.000 hasta 300.000 pesos por sesión, y existen paquetes en plataformas en línea que ofrecen, por ejemplo, cuatro sesiones por 180.000 pesos. Este marco de opciones de atención psicológica se propone como alternativa para gestionar impulsos y evitar conductas que puedan derivar en daños a la propiedad o en situaciones legales más complejas, subrayando la idea de una red de apoyo para prevenir episodios similares en el futuro.
«Quería ser famoso pero no de esta manera 😂» – Anónimo, Propietario del automóvil
Aunque los elementos del caso siguen evolucionando, lo ocurrido en Bogotá refleja un fenómeno mediático que mezcla vandalismo, posibles estrategias de publicidad y debates sobre responsabilidad afectiva y emocional. En el panorama local existen debates sobre la responsabilidad civil y penal asociada a la acción de rayar un bien ajeno, y la conversación pública continúa entre usuarios de TikTok y otros espectadores que siguen el caso a través de las publicaciones de la cuenta @pandita100913, así como las reacciones vinculadas al perfil de @thommy_torres. Mientras tanto, las autoridades y especialistas en derecho y salud mental señalan la importancia de buscar ayuda emocional para gestionar conflictos y evitar que estas situaciones escalen hacia daños a terceros y a partir de ello, posibles sanciones legales.
















