Karina García abandona hospital en camilla para ir a La mansión de Luinny, República Dominicana

Compartir en redes sociales

En el marco de Stream Fighters 4, Karina García salió del hospital en camilla tras la pelea con Karely Ruiz, y la escena quedó marcada por la bandera de Colombia pintada en su rostro mientras solicitaba alta voluntaria para viajar a República Dominicana y sumarse a La mansión de Luinny, donde inició su participación el 29 de octubre. En el episodio también estuvieron presentes Yailin La Más Viral y Manelyk González, quienes expresaron preocupación por su estado, mientras Andrés, el maquillador del equipo, coordinaba la salida para evitar más retrasos y preservar la salud de la creadora de contenido colombiana.

El relato que se hizo público durante la transmisión detalló que García no buscó entrevistas en ese momento y que, según lo que le contaron, bajó las escaleras y se desmayó al llegar a su camerino, donde la dejaron en un sofá y empezó a vomitar. El equipo insistía en la necesidad de retenerla en el hospital, pero García insistía en su alta voluntaria; el maquillador Andrés llegó a decir en tono de broma y preocupación: “De malas, saquémosla”. En medio de la conversación, la propia Karina aseguró que sus signos vitales estaban superbién, negó taquicardia y recalcó que, pese a sentirse mal, no se trataba de tristeza por la derrota sino de un malestar físico que la empujó a abandonar la atención médica para asistir al evento posterior. En su relato también mencionó que, pese a la molestia, no descartaba sus compromisos y aclaró que, a pesar de todo, a veces su trayectoria la ha llevado a tomar decisiones rápidas, incluso recordando su pasado como enfermera de nueve años. En la conversación quedó claro que en Bogotá fue mencionada como referencia dentro de la historia, un detalle que aportó a la narrativa de su trayectoria. Entre tanto, García dejó en claro que su prioridad era su salud y su decisión de no conceder entrevistas en ese momento, aunque el plan de su agenda continuaba con la participación en La mansión de Luinny a partir del 29 de octubre.

Debate en redes sobre priorizar la salud frente a la agenda de eventos

La salida de Karina García del hospital para asistir a un evento posterior generó un intenso debate en redes sobre hasta qué punto debe priorizarse el bienestar físico frente a las obligaciones de participar en fiestas y producciones de alto perfil. El hecho de que la propia protagonista haya explicado en vivo el traspaso entre escenarios, la visibilidad de su condición y la decisión de continuar trabajando a pesar del malestar físico impulsó respuestas en torno a si las afectaciones médicas deben detener o frenar compromisos de alto perfil en estas plataformas. En el entorno inmediato, además, estuvieron presentes Yailin La Más Viral y Manelyk González, cuya preocupación por García fue mencionada en las comunicaciones, mientras el equipo, incluido Andrés, trabajaba para gestionar la situación sin comprometer la salud ni la seguridad de la influencer, y la historia comenzó a viralizarse con rapidez en redes.

«Cuando yo salí de la pelea de bebés, yo me desmayé. Me desmayé. Ustedes vieron que yo me fui caminando, me despedí de todos, me pidieron una entrevista y no la quise dar, pero es porque me sentía muy mal, no porque estaba triste porque perdí, para nada. Y cuando bajé las escaleras me desmayé, llegué a mi camerino, pues es lo que me cuentan, porque yo no me acuerdo, me acostaron en el sofá y empecé a vomitar» – Karina García

La cobertura también subraya que, en el marco de estas declaraciones y del inicio de su participación en La mansión de Luinny, todo se desarrolla con una mezcla de preocupación por su estado de salud y la viralidad de las confesiones durante la transmisión. Si bien la noticia gira en torno a su bienestar, el contexto de rivalidad mediática con Karely Ruiz y la atención de protagonistas como Yailin La Más Viral y Manelyk González mantienen el foco en la agenda de contenidos y en la dinámica de estas figuras públicas. En definitiva, la historia muestra la tensión entre salud, presencia pública y la logística de participar en eventos posteriores, con el 29 de octubre marcado como fecha clave para el inicio de su etapa en La mansión de Luinny en la República Dominicana y la mención de Bogotá como referente en su relato.

Sigue leyendo