En una cobertura de La Veintitrés Manizales, operativos militares de Estados Unidos contra embarcaciones presuntamente vinculadas al narcotráfico, ejecutados en aguas del Pacífico colombiano frente a Nariño, han generado temor entre pescadores artesanales y provocado una caída de hasta el 60% en las faenas nocturnas. Los habitantes de las comunidades costeras describen un ambiente de vigilancia intensificada y una interrupción notable de la actividad pesquera en horarios estratégicos para la subsistencia familiar.
Los representantes de comunidades costeras, entre pescadores, transportadores de pasajeros y campesinos, señalan que las operaciones y ataques en alta mar, realizados por fuerzas militares extranjeras, han redefinido la rutina diaria en la región. La presencia se ha fortalecid o en las aguas del Pacífico colombiano frente a Nariño, con un impacto directo en la pesca nocturna y, por ende, en los ingresos de decenas de familias que dependen de esta actividad para su sustento. Aunque no se especifica una fecha exacta, la cobertura llega tras los operativos recientes y señala que la situación es actual y cambiante.
La tensión entre la pesca artesanal y la vigilancia en el Pacífico colombiano
Contextualmente, el aumento de la presencia militar extranjera en las aguas del Pacífico colombiano y las operaciones contra embarcaciones vinculadas presumiblemente al narcotráfico han marcado este escenario. Las informaciones disponibles destacan que la vigilancia y las acciones en altamar han alterado la vida cotidiana de las comunidades pesqueras, intensificando el temor y reduciendo la actividad económica de las familias que dependen de la pesca artesanal. Este recorte en la faena nocturna —una acción que algunas familias describen como crucial para su supervivencia— es la consecuencia más visible de un fenómeno que, según testimonios recogidos por pescadores, podría extenderse si persiste la presencia militar internacional en la zona. La información se sustenta en reportes de pescadores y testimonios de comunidades costeras, y el crédito de la imagen aparece como Fernando Vergara/AP; las declaraciones recogidas para esta nota provienen de Blu Radio.
«La muerte. No significa otra cosa sino la muerte. Y sobre eso, nosotros hacemos ese llamado a la comunidad internacional. Y es que tenemos que unirnos, tenemos que juntarnos para salvar vidas» – Pescador no identificado, entrevistado por Blu Radio
«Estados Unidos arrecia contra cualquier ser humano, aun sin tener la certeza de si esa persona está delinquiendo», añadió – Pescador no identificado, entrevistado por Blu Radio
En síntesis, estas operaciones y la vigilancia en altamar alimentan un clima de temor que impacta directamente en la economía local de Nariño y en la vida cotidiana de decenas de familias que viven de la pesca artesanal. Las repercusiones no se limitan a la pérdida de ingresos, sino que también alteran las rutinas, las rutas de navegación y la seguridad de quienes dependen del mar para su sustento diario. La información disponible proviene de testimonios de pescadores y de comunicados de Blu Radio, y se contextualiza dentro de un marco de mayor presencia militar extranjera en la región Pacífico.
















