Alfonso Reyes Echandía pidió alto al fuego en la toma del Palacio de Justicia, Bogotá

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Durante el 6 y 7 de noviembre de 1985, la toma y la posterior retoma del Palacio de Justicia en Bogotá constituyeron una crisis que marcó a fuego la historia de la justicia en Colombia. En medio del asalto, Alfonso Reyes Echandía, entonces presidente de la Corte Suprema de Justicia, pidió un cese al fuego para salvar la vida de magistrados y del personal que se encontraba atrincherado en el edificio.

Entre los protagonistas figuran Belisario Betancur, entonces presidente de la República; Alfonso Jacquin y Jaime Castro, ministros de áreas clave, así como el Movimiento 19 de Abril (M-19). Los insurgentes tomaron el inmueble y mantuvieron como rehenes a magistrados, empleados y visitantes, mientras las fuerzas del Estado respondían con una intervención militar que involucró tanques y unidades especiales. El enfrentamiento dejó daños parciales en oficinas y archivos históricos, y, según los reportes de la época, decenas de personas murieron y varias permanecen desaparecidas. En las deliberaciones oficiales, Reyes Echandía insistió en el cese del fuego y en abrir un canal de diálogo, consciente de la tensión entre la demanda del M-19 de instalar un tribunal político para juzgar al presidente Belisario Betancur y la decisión gubernamental de continuar la operación. Jaime Castro, entonces ministro de Gobierno, explicó detalles de la llamada del presidente de la Corte y la forma en que se informó al M-19 la solicitud de cesar las hostilidades.

Conmemoración de 40 años y su impacto en la justicia y la seguridad

Este 2025 se cumplen cuarenta años de aquel episodio, una fecha que el país recuerda para analizar el cambio profundo que provocó en la institucionalidad, la seguridad y la gestión de crisis. La destrucción parcial del edificio, la desaparición de expedientes históricos y la pérdida de varias vidas —magistrados, personal judicial y civiles— dejó una huella imborrable en la memoria colectiva. La conmemoración sirve para debatir cómo equilibrar la necesidad de intervención para restablecer el orden con la obligación de proteger la vida humana y salvaguardar la integridad de las instituciones. En ese marco, la cobertura de La Veintitrés Manizales busca contextualizar el hecho para las audiencias regionales y recordar su influencia en la configuración de políticas de seguridad y justicia en Colombia.

«Inmediatamente, divulgue ante la opinión pública. Inmediatamente. Es urgente, es de vida o muerte. ¿Sí me oyen?» – Alfonso Reyes Echandía, Presidente de la Corte Suprema de Justicia

«Que el presidente de la República dé finalmente la orden de que cese el fuego, inmediatamente» – Alfonso Reyes Echandía, Presidente de la Corte Suprema de Justicia

«Un momento, por favor. Un momento» – Alfonso Reyes Echandía, Presidente de la Corte Suprema de Justicia

Jaime Castro, ministro de Gobierno de la época, dio cuenta de detalles sobre la llamada de Reyes Echandía y de la comunicación al M-19 de la solicitud de frenar las hostilidades. La dinámica de aquel 1985, en la que la petición de la Corte coincidía con las demandas del M-19, mostró las complejidades de una crisis en la que la seguridad del Estado y la integridad de la justicia vivieron un periodo de prueba. Con esta memoria, La Veintitrés Manizales ofrece una síntesis de aquellos hechos, subrayando su relevancia histórica y su impacto duradero en la forma en que Colombia aborda la crisis, la seguridad institucional y la protección de la vida en escenarios de conflicto.

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