Consejo de Estado niega la primera demanda de pérdida de investidura contra David Racero, SENA Cesar

El Consejo de Estado negó la primera de tres demandas de pérdida de investidura presentadas contra David Racero, representante a la Cámara por el Pacto Histórico, por presunto tráfico de influencias en la regional del Sena en Cesar. La decisión, tomada tras una audiencia de más de cuarenta minutos, descarta como evidencia audios y mensajes de texto por carecer de la autorización de los interlocutores y por no haber sido aportados directamente por ellos; la fecha exacta del fallo no fue especificada, pero el proceso no se clausura y quedan dos demandas más en curso.

La resolución mantiene en curso la investigación que involucra a Racero, quien enfrenta en total tres demandas de pérdida de investidura. Además de la primera que fue desestimada en esta diligencia, existen otras dos pendientes de resolución. Paralelamente, la Corte Suprema de Justicia avanza investigaciones por presunto enriquecimiento y abuso de poder, lo que añade un marco de preocupación sobre la relación entre el representante y la estructura del Sena en Cesar. Entre los elementos que rodean el caso se destacan documentos y chats revelados que muestran conversaciones sobre nombramientos y beneficios en la región, así como un depósito superior a cinco millones de pesos en la cuenta personal de un colaborador del equipo legislativo de Racero, lo que ha alimentado el debate público.

El debate sobre las pruebas digitales y el alcance de la investigación

El fallo del Consejo de Estado abre un frente de debate sobre la interpretación de pruebas digitales en Colombia, particularmente cuando se tratan de audios y mensajes de texto que pueden o no ser autorizados por las partes involucradas o ser aportados por terceros. En este contexto, la noticia llega en un momento en que la cobertura de varios medios y voces críticas señala vacíos en los criterios probatorios frente a casos de presunta corrupción y tráfico de influencias. En la cobertura figuran fuentes como Colprensa, W Radio, Daniel Coronell y Semana, que han contribuido a un panorama reticente sobre las prácticas políticas y jurídicas en la relación entre Racero y la red del Sena Cesar.

«Se trata de suposiciones sin fundamento» – David Racero, representante a la Cámara del Pacto Histórico

«¿Crees viable que los puestos del Centro Democrático nos los den a nosotros en el Cesar, de OPS?» – David Racero

«La propuesta es para mí segundo nivel, ¿cierto? Y para mi tío. Con esos dos está bien. Miremos entonces los 15» – David Racero

En este marco, los antecedentes señalan una investigación por presunto tráfico de influencias que habría buscado favorecer a allegados, incluido un tío del propio Racero. Por qué es noticia ahora radica en que el Consejo de Estado descartó como evidencia estos elementos digitales, lo que reaviva el debate sobre la validez y alcance de las pruebas en contextos de corrupción, sin que ello signifique el cierre del caso. El proceso continúa con otras dos demandas y la trayectoria jurídica de Racero se mantiene bajo la lupa, mientras la Corte Suprema de Justicia profundiza las pesquisas sobre enriquecimiento y abuso de poder, generando cuestionamientos políticos y jurídicos sobre la relación entre el congresista y la estructura del Sena en Cesar.