Un taxi conducido en estado de embriaguez arrolló a 11 personas en la noche del sábado 8 de noviembre de 2025, en La Sierra, San Cristóbal, Bogotá. El hecho ocurrió alrededor de las 7:39 p.m. en la Calle 47 Sur con Carrera 6, cuando peatones cruzaban o estaban en el andén y el taxi los alcanzó. Entre las víctimas hay cuatro menores; dos de ellos presentan muerte cerebral, según los reportes médicos preliminares, y varios adultos con politraumatismos fueron trasladados a los hospitales de Santa Juliana y La Victoria, mientras que algunos registran atención en Santa Clara.
La detención del conductor se produjo en flagrancia y la Fiscalía General de la Nación asumió la investigación para esclarecer las responsabilidades. En el lugar y en los hospitales relacionados se han escuchado testimonios de familiares de las víctimas, entre ellos Heidy Miranda, familiar de las víctimas; Jorge Arturo, padre de las víctimas; y Ángel Torres, tío de las víctimas. Inicialmente, se confirmó que la noche dejó 11 víctimas y que, entre los heridos, cuatro eran menores de edad. Tres hermanos quedaron atrapados bajo el mismo vehículo durante el choque. Los adultos, con edades entre 22 y 40 años, presentan politraumatismos y fueron trasladados a Santa Juliana y La Victoria; Santa Clara figura como parte del registro médico de algunos de los pacientes, en tanto la evolución de los casos continúa sin un parte definitivo hasta el momento.
Nuevo video circula y voces de familiares y autoridades se intensifican
La circulación de un nuevo video en redes sociales ofrece otra perspectiva del incidente, aumentando la atención pública y la presión para esclarecer lo ocurrido. Heidy Miranda, citada por la familia, relató: “Estefanía tiene muerte cerebral, Martín está igual. Daniela está estable en este momento” y añadió: “Solo estamos esperando que Dios obre en esta familia y los llene de fortaleza”. Por su parte, Jorge Arturo, padre de las víctimas, expresó con dolor: “No tiene presentación, no me hallo porque yo los dejé bien (…) yo a mis hijos los amaba, los amo y los adoro. Pero si es de Dios Todopoderoso que no estén más con nosotros se los entrego” y añadió: “Miren las consecuencias, hoy me pasó a mí, mañana le puede pasar a usted”. Ángel Torres, tío de las víctimas, agregó: “Esto no puede seguir pasando, desgraciadamente no sé qué pasa con los organismos de transporte, cómo pueden habilitar a conductores dizque con experiencia” y afirmó: “Espero que haya un castigo riguroso para esa persona (…) Tomemos conciencia de que no podemos estar perdiendo a nuestros niños por irresponsabilidades como esta, que no vuelva a pasar”.
«Dentro del desarrollo investigativo, se puede establecer que el conductor de este vehículo se encontraba bajo los efectos de las bebidas embriagantes. El dictamen determinó que se encontraba con grados de embriaguez, por lo cual fue capturado en flagrancia y puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación para que responda ante este lamentable hecho» – Coronel John Silva, comandante de la Policía de Tránsito de Bogotá
La investigación continúa y, en el marco de los datos secundarios, se confirma que una prima de los niños podría ser trasladada a otro centro para cirugías de rodilla, cadera y brazos. Mientras tanto, familiares, vecinos y amigos permanecen en los hospitales buscando información y exigiendo justicia ante un episodio que ha causado un dolor profundo y una preocupación creciente por la seguridad vial en la ciudad.
