La agencia Fitch Ratings advierte que el déficit de gas en Colombia se duplicará hacia 2027, elevando los costos para los usuarios finales por importaciones y regasificación, en un contexto marcado por la decisión del Gobierno de Petro de no firmar nuevos contratos de exploración y explotación. Según la calificadora, la brecha entre oferta y demanda podría ampliarse significativamente, lo que alimentaría riesgos de racionamiento y volatilidad de precios que afectarían tanto a hogares como a empresas.
En mayo de 2025 la producción nacional alcanzó 800 millones de pies cúbicos diarios, un 18,1% menos que en 2024, lo que deja a Colombia en una situación de mayor dependencia de importaciones. La proyección de Fitch señala que la brecha de gas podría pasar de un rango de 5-7% en 2025 a aproximadamente 27% en 2027, con un déficit nacional estimado en 1.100 millones de pies cúbicos diarios. A la fecha, la única alternativa de importación suficiente para cubrir parte de la demanda es la Sociedad Portuaria El Cayao, en Cartagena, con una capacidad de 533 mmcf/d, cifra que no alcanza a cubrir el déficit previsto para el país.
La consultora también advierte que el desbalance se agravará en 2026, con un 11% de demanda esencial desatendida y un 50% de desbalance en el sector industrial, que representa casi el 38% de la demanda total. Los precios de referencia podrían superar los 20 USD por MMBtu, el doble de los aproximadamente 10 USD por MMBtu en periodos anteriores. En cuanto a el impacto tarifario, se esperan incrementos regionales de alrededor de 36% en Bogotá, 21% en Medellín y 10% en la Costa Atlántica, mientras que los recaudos de las transportadoras y distribuidoras se sitúan por encima del 90%.
Riesgos de costos y vulnerabilidad ante la política de suministro
«La regulación existente permite trasladar a los usuarios finales las alzas en el precio de la molécula y todos los costos adicionales de transporte y regasificación» — Fitch Ratings
«El aumento en los precios finales no deteriora los índices de recaudo, que permanecen arriba de 90%» — Fitch Ratings
«La regulación actual prioriza la demanda esencial, lo que incrementa la vulnerabilidad del rubro industrial no regulado» — Fitch Ratings
En el plano de contexto, Ecopetrol confirmó un proyecto de regasificación en Coveñas para fortalecer el suministro de gas en Colombia, mientras que la capacidad de importación actual resulta insuficiente para cubrir el déficit (533 mmcf/d frente a 1.100 mmcf/d). Upme (Unidad de Planeación Minero-Energética) priorizó la habilitación de tres nuevos puntos de entrada de gas importado para finales de 2026, y la infraestructura existente ya depende de la importación vía la Sociedad Portuaria El Cayao en Cartagena como la opción reciente más relevante.
Esta situación alimenta el debate sobre la necesidad de contratos a largo plazo y diversificación de suministro para evitar choques tarifarios y mitigar la exposición del sector industrial no regulado ante un déficit gasífero que, según Fitch, podría seguir escalando en la próxima década.

















