La comunidad de Aguachica, en el departamento del Cesar, conmemoró este lunes 29 de diciembre de 2025 el primer aniversario de la trágica masacre de la familia pastoral Lora Rincón, ocurrida exactamente un año atrás en el restaurante Sorbetes y Sabores. Marlon Lora, pastor evangélico; su esposa Yurlay Rincón; su hija Ángela Lora y su hijo Santiago Lora perdieron la vida en un ataque armado perpetrado por sicarios que los confundieron con su objetivo, Zaida Andrea Sánchez Polanco, conocida como alias la Diabla. La familia almorzaba en el lugar tras participar en un servicio dominical en la iglesia Príncipe de la Paz, ubicada en el barrio Villa Paraguay, cuando el sicario descendió de una motocicleta y abrió fuego contra ellos por una similitud en la vestimenta: pantalón negro y camiseta blanca, similar a la que portaba la mujer buscada, quien fue identificada en cámaras de seguridad huyendo en una camioneta.
El crimen formó parte de una retaliación entre bandas criminales, desencadenada por el asesinato de Javier Alfonso Veloza, alias Jhon Mechas y pareja sentimental de alias la Diabla, perpetrado dos días antes, el 27 de diciembre de 2024. Las autoridades, incluyendo la Policía Nacional, la Sijín, la Dijín, la Regional 8 y la Fiscalía, revisaron más de 220 horas de videovigilancia para esclarecer los hechos. Dos meses después del suceso, en febrero de 2025, fueron capturados cuatro implicados en Cúcuta y Villa del Rosario: José Leal Rodríguez, señalado como el sicario; Jorge Luis Valderrama, el conductor de la motocicleta; Jairo Andrés Miranda, alias el Logístico; y Leonardo Barraza Castillo, el identificador de la supuesta objetivo. Estos enfrentan cargos por homicidio agravado y porte ilegal de armas de fuego, en medio de investigaciones que vinculan el caso a disidencias de las Farc y otras estructuras criminales.
Plantón y plegarias por justicia y reconciliación
La conmemoración incluyó un plantón, plegarias y una jornada de oración en el mismo restaurante donde ocurrió la masacre, con el propósito de exigir celeridad en el proceso judicial y promover la reconciliación en la comunidad. A pesar de la tragedia, la iglesia Príncipe de la Paz experimentó un notable crecimiento en el número de feligreses y un fortalecimiento en su espíritu misional. Actualmente, está liderada por el pastor Giovanni Bermúdez Santos, quien llegó temporalmente pero decidió quedarse para continuar el legado de Marlon Lora, conocido por llevar la palabra de Dios a los lugares más apartados hasta consolidar la congregación, en la que toda su familia estaba comprometida, incluyendo a Ángela, destacada predicadora.
«El pastor Marlon eso fue lo que enseñó, llevar la palabra de Dios a todos los lugares, así empezó él recorriendo los sitios más apartados, hasta que consolidó la iglesia en la que tanto él como su familia estaban comprometidos. Ángela era también una buena predicadora. Suena un poco extraño, pero cuando suceden estas cosas la fe se fortalece y eso es lo sucedido con la iglesia que lideraba el pastor Marlon, ahora hay un nuevo pastor que llegó por pocos días, pero se ha quedado y sigue avanzando».
Giovanni Bermúdez Santos, pastor de la iglesia Príncipe de la Paz
De las cuatro víctimas fatales, Marlon, Yurlay y Ángela murieron en el lugar de los hechos, mientras que Santiago falleció al día siguiente en una clínica. Este suceso subraya la violencia persistente en la región por disputas entre grupos armados ilegales y resalta el impacto en familias inocentes atrapadas en medio de confusiones letales. La información se basa en reportes de El Heraldo, así como en publicaciones de Facebook, TikTok de @andresanchezp5, X y la emisión Los Informantes de Caracol TV.

















