Los gremios Andi y Acemi exigieron un aumento urgente de la Unidad de Pago por Capitación (UPC) para 2026, con al menos un 15,6% propuesto por Andi y hasta un 17,33% según Acemi, que elevaría el valor contributivo a 1.785.164 pesos y el subsidiado a 1.552.403 pesos, ante las pérdidas récord de las EPS del régimen contributivo, donde la siniestralidad superó el 111% al cierre de octubre de 2025. Esta demanda se basa en cálculos de siniestralidad, gastos reportados en 2024, frecuencias e inflación, y busca cumplir con las órdenes de la Corte Constitucional sobre el rezago de 2024 y déficits hasta 2021, en un contexto donde el Ministerio de Salud debe anunciar la UPC antes del 31 de diciembre de 2025.
El sector salud colombiano atraviesa su momento más crítico, con las EPS operando en números rojos y un déficit proyectado de 9 billones de pesos a diciembre de 2025, sumado a un hueco operativo de 10,2 billones para este año, mientras la siniestralidad ha estado por encima del 99% desde 2021, superó el 100% desde 2022 y se estima en 105,9% al cierre de 2025. Andi y Acemi alertan sobre un sistema tensionado por el cierre de servicios en IPS, el aumento de tutelas y deudas acumuladas, con un presupuesto de Adres para 2026 superior a los 48 billones de pesos que, según los gremios, debe destinarse estrictamente al aseguramiento.
Cifras que evidencian la crisis
La Superintendencia de Salud reportó datos de octubre que confirman la siniestralidad por encima del 111%, mientras las mesas técnicas sobre UPC terminaron hace más de tres meses sin publicaciones, dejando estancada la reforma a la salud. Acemi insiste en la necesidad de transparencia mediante reportes administrativos estandarizados y retroalimentación detallada del Ministerio de Salud, dirigido por Guillermo Alfonso Jaramillo, para consolidar una base cierta del gasto en el país y evitar la eliminación de registros.
“Datos agregados de todas las EPS indican que este indicador supera el 111%… Se estima que a diciembre 31 de 2025 el déficit del periodo alcanzará los 9 billones de pesos, que se suma al de años anteriores y que están representados en carteras atrasadas entre todos los agentes”
Acemi
Los gremios destacan que no es compatible la mayor inversión en infraestructura y equipos básicos de salud con el desfinanciamiento persistente de la UPC, que protege financieramente a la población, ya que esto derivará en mayor enfermedad y gasto a largo plazo, en una decisión política poco costo efectiva.
“Si estos recursos se destinan estrictamente al aseguramiento y no se desvían a otros programas, el Estado tiene la capacidad de cubrir el ajuste requerido”
Andi
“De manera reiterada se ha insistido en la importancia de contar con un proceso de retroalimentación suficiente y detallado. El diálogo técnico y la estandarización de los reportes, así como lineamientos claros desde el Ministerio de Salud contribuyen a que no se eliminen registros y se consolide una base cierta del gasto en salud del país”
Acemi
En este panorama, la UPC, que define los giros del Gobierno por afiliado, permanece sin ajustes que respondan a la realidad operativa, agravando las tensiones en el sistema de salud colombiano, según información de Acemi, Andi, la Superintendencia de Salud y el Ministerio de Salud.

















