El secretario general de la ONU instó al país a mantener el impulso en la implementación del Acuerdo de Paz y destacó los avances en reforma rural, reincorporación y justicia transicional.
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La afirmación fue hecha por António Guterres en su más reciente informe sobre la Misión de Verificación de las Naciones Unidas en Colombia, correspondiente al periodo entre el 27 de junio y el 26 de septiembre de 2025. En el documento, el Secretario General insistió en la necesidad de garantizar que el país no retroceda en los avances logrados en la construcción de una nación más pacífica y segura.
El camino hacia la paz en Colombia ha sido moldeado no solo por la determinación de su pueblo, sino también por el apoyo inquebrantable de la comunidad internacional, señaló Guterres, quien agregó que el mundo se beneficiará directamente de las experiencias colombianas en materia de construcción de paz.
Asimismo, reafirmó que la Misión de Verificación continuará su importante labor para garantizar que las aspiraciones de paz se traduzcan en realidades duraderas sobre el terreno.
El informe fue presentado ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en Nueva York por Miroslav Jenča, representante especial del Secretario General y jefe de la Misión de Verificación en Colombia.
En el documento, Guterres destacó los avances en la reforma rural, que han beneficiado a campesinos, mujeres rurales y comunidades étnicas, así como el progreso en la adjudicación y formalización de tierras. Durante el periodo evaluado, se alcanzó un 9 % del objetivo de tres millones de hectáreas adjudicadas y cerca de la mitad de la meta de siete millones de hectáreas formalizadas.
La ampliación del acceso a la tierra y a oportunidades de subsistencia ofrece alternativas viables a las economías ilegales y la violencia conexa. Las disposiciones del Acuerdo de Paz relativas a la reforma rural integral pueden reforzar considerablemente la productividad del sector agrícola y contribuir a reducir la pobreza rural, indicó Guterres.
El Secretario General también hizo un llamado a acelerar la implementación de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), diseñados en consulta con las comunidades rurales.
En materia de reincorporación, el informe resalta el avance en la consolidación de un marco normativo e institucional integral para los más de 11.000 excombatientes que participan en el proceso. Al proporcionar oportunidades para lograr medios de vida dignos, los esfuerzos de reincorporación liderados por el Estado desempeñan un papel fundamental para romper el círculo vicioso del conflicto armado, señaló.
El documento también evidencia un mayor impulso en la implementación del Capítulo Étnico, con medidas de seguimiento en tres áreas clave: acceso a la tierra, PDET y reincorporación de excombatientes de origen étnico.
De otro lado, Guterres reconoció la emisión de las primeras sentencias restaurativas de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) como un momento crucial en la implementación del Acuerdo. A través de este mecanismo innovador, las partes se comprometieron a garantizar la rendición de cuentas por los delitos más graves cometidos durante décadas de conflicto y reparación para las víctimas, afirmó.
El Secretario General subrayó que es esencial que las personas condenadas de todas las partes en el conflicto sigan demostrando su compromiso con la paz, cumpliendo plenamente sus sanciones, y que el Estado colombiano asegure los recursos y garantías necesarios para ello.
Ahora es fundamental mantener el impulso y evitar retrasos indebidos al traducir las sanciones propias en acciones restaurativas en beneficio de las víctimas, puntualizó.
