Alcaldía intensifica medidas en esta temporada de lluvias y realizan monitoreo en 54 puntos vulnerables.
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La Alcaldía de Armenia intensificó los protocolos de monitoreo y atención para enfrentar las afectaciones causadas por las fuertes lluvias que impactan a la ciudad.
Hasta el momento se han identificado 54 asentamientos en zonas de alto riesgo, donde la ocupación ilegal pone en peligro a cientos de familias que habitan en estos lugares.
Desde la Oficina Municipal para la Gestión del Riesgo de Desastres, se ha hecho un llamado urgente a las comunidades en estas áreas, en especial a quienes residen en zonas de ladera, a acatar las recomendaciones emitidas por la administración.
Estos asentamientos, propensos a deslizamientos y otras emergencias, requieren medidas de precaución debido a la sobresaturación de los suelos causada por el inadecuado manejo de aguas de lluvia, lo cual aumenta la inestabilidad del terreno.
El alcalde James Padilla García se refirió a la situación y al compromiso de su equipo con la seguridad de la comunidad: “Las zonas de alto riesgo, especialmente en asentamientos, son un problema histórico y complejo de resolver. Sin embargo, estamos trabajando en visitas de acompañamiento y seguimiento con los entes de control para que las familias que viven en estas áreas comprendan los riesgos de permanecer allí”.
Los daños que provocan las lluvias se agravan cuando el agua de escorrentía, procedente de tejados y otros puntos, es arrojada directamente sobre los taludes sin ningún tipo de canalización, lo que aumenta las probabilidades de deslizamiento.
Ante esta situación, la Alcaldía hace un llamado a la responsabilidad compartida, recordando lo establecido en la Ley 1523 de 2012: “La Gestión del Riesgo de Desastres es responsabilidad de todas las autoridades y de los habitantes del territorio colombiano”.
La Administración Municipal reitera la necesidad de que las comunidades en estas zonas vulnerables sigan las recomendaciones técnicas de los profesionales, con el fin de salvaguardar la vida e integridad de quienes residen en las áreas de alto riesgo.
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Desde la Omgerd se han emitido una serie de recomendaciones:
- Evitar el sobrepeso sobre la corona del talud, provocado por depósitos de escombros, parqueaderos de vehículos y residuos sólidos en general.
- Vigilar el efecto de las aguas de escorrentía sobre los taludes.
- Mantener y limpiar zanjas de coronación y sistemas de sumideros de aguas.
- Evitar manipular el talud, especialmente en temporadas de lluvias.
- Proteger la vegetación nativa del talud.
- Evitar arrojar residuos sólidos y escombros sobre zonas de ladera.
- Manejar las aguas lluvias de los techos de las viviendas colocando canaletas y direccionarlas a través de bajantes a una recámara.
- Reforzar la estructura de las viviendas que se encuentran en el quiebre de pendiente del talud.
- Proteger con plásticos los taludes para disminuir el efecto de erosión de las aguas lluvias.
- Retirar la mayor cantidad de escombros y residuos sólidos de la ladera, a fin de quitarle presión al terreno.
- Mejorar la cobertura vegetal de porte bajo, implementando siembra de grama, césped, maní forrajero o pasto vetiver.
- Evitar la presencia de árboles de gran altura sobre el quiebre del talud, ya que su peso y desarrollo de raíces facilitan los deslizamientos.
- Vigilar el mantenimiento y protección de los guaduales, ya que actúan como muro de contención natural.
- Sellar las grietas localizadas en el área de antejardín con cemento, para evitar efectos negativos por filtración de agua por las ranuras.
- Los colchones, sillas y elementos grandes arrojados a las quebradas desvían su curso y facilitan la socavación de la orilla, detonantes de deslizamientos mayores.
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Fuente: Alcaldía de Armenia.
