Ataques del ELN dejan dos policías muertos en Cúcuta y Villa del Rosario, Norte de Santander

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En una serie de ataques atribuidos al Ejército de Liberación Nacional (ELN), ocurridos durante la noche del 6 y la madrugada del 7 de diciembre en Cúcuta y Villa del Rosario, Norte de Santander, dos policías perdieron la vida: el intendente Franklyn Alfonso Guerrero Yáñez y el subintendente Jairo Andrés Holguín Calderón. Al menos seis agentes más resultaron heridos, mientras que la infraestructura sufrió graves daños, incluyendo cortes eléctricos en barrios como Prados del Este, Escobal, García Herreros, El Salado y San Faustino. Entre los civiles afectados destacaron el medallista olímpico Jossimar Calvo y su esposa Gina Zambrano, cuyo vehículo fue destruido por la onda expansiva de una explosión, aunque ambos fueron atendidos en una clínica y se encuentran fuera de peligro. Las autoridades ofrecieron una recompensa de 150 millones de pesos por información que lleve a capturar a los responsables de estos atentados, que incluyeron explosiones contra torres de energía en el anillo vial oriental, ráfagas de fusil contra el CAI Morichal en el anillo vial occidental y un artefacto explosivo lanzado contra una patrulla.

Estos eventos se enmarcan en un patrón de violencia en la zona fronteriza con Venezuela, como represalia por recientes operaciones y capturas contra el ELN, particularmente contra la estructura financiera liderada por alias “El Koki”, por quien existe una recompensa adicional de 40 millones de pesos. Un ataque previo el 2 de diciembre en Agua Clara, Cúcuta, ya había dejado un policía muerto y otro herido, evidenciando la escalada de hostilidades en la región.

Refuerzos y respuesta institucional

El general William Rincón Zambrano, director de la Policía Nacional, lideró un consejo de seguridad junto a representantes de la Gobernación, la Alcaldía, la Fiscalía y el Ejército, anunciando el despliegue de 380 policías adicionales, de los cuales 130 ya están confirmados en la zona. El gobernador William Villamizar y el alcalde Jorge Acevedo confirmaron estos refuerzos, que incluyen tropas del Ejército Nacional cerca de la frontera con Venezuela, junto con un fortalecimiento de la inteligencia, investigaciones y control territorial. Se activó la línea 107 para recibir información ciudadana sobre los hechos.

“afortunadamente salió ileso. No tiene heridas que sean de peligro, solamente el golpe, el impacto”

Jairo Ruiz, entrenador de Jossimar Calvo

“Buscarán crear violencia en la frontera y nuestro pie de fuerza en la frontera colombo-venezolana debe aumentar. Lamento la pérdida de estos dos jóvenes policías colombianos. La muerte fratricida no permite una Colombia grande. No más sangre entre nuestras familias”

Gustavo Petro, presidente de la República

El CAI Morichal, previamente atacado, ahora cuenta con mayor protección, mientras las autoridades avanzan en las pesquisas para desmantelar las redes responsables. Estos incidentes subrayan la urgencia de consolidar la paz en las fronteras, donde la violencia persiste como obstáculo para el desarrollo regional.

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