La Dirección Territorial de Salud de Caldas advirtió sobre los riesgos del uso de productos derivados del cannabis sin control sanitario y reiteró la importancia de eliminar los estigmas que rodean los tratamientos psiquiátricos.
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La Dirección Territorial de Salud de Caldas (DTSC), a través de su equipo de Salud Mental, reiteró la importancia de comprender el impacto de las sustancias psicoactivas en la salud y de eliminar los estigmas asociados a su consumo, especialmente en el ámbito terapéutico.
María Isabel Londoño, psicóloga de la DTSC, explicó que estas sustancias generan alteraciones en el sistema nervioso central y pueden clasificarse en dos tipos: lícitas, como el alcohol, el cigarrillo y ciertos medicamentos regulados en el país, e ilícitas, como la cocaína, heroína y algunos derivados del cannabis.
La profesional señaló que, aunque el estigma históricamente ha recaído sobre las sustancias ilegales, actualmente también afecta el uso de medicamentos prescritos para el manejo de la salud mental. “Es fundamental entender que los tratamientos psiquiátricos deben seguir la orientación de un profesional de la salud; sin embargo, el miedo al señalamiento limita muchas veces el acceso de los pacientes a terapias necesarias, lo que puede poner en riesgo su bienestar y su recuperación”, afirmó.
De igual manera, advirtió sobre el uso indiscriminado de productos con CBD (Cannabidiol), un compuesto químico de la planta Cannabis sativa que no tiene efectos psicoactivos y que se comercializa en diferentes presentaciones para consumo y cosmética, en ocasiones sin registro sanitario ni garantías de cultivo regulado.
“Esto representa un riesgo para la salud, pues algunos productos podrían contener trazas de THC (Tetrahidrocannabinol), que es el principal compuesto psicoactivo de la planta de cannabis, responsable de los efectos de alteración mental”, precisó Londoño.
La Dirección Territorial de Salud recordó que la comercialización de productos sin registro sanitario o sin autorización de las autoridades competentes constituye un riesgo para la salud pública, por lo que insistió en la necesidad de adquirir únicamente aquellos avalados por las entidades regulatorias.
El llamado incluye la recomendación de confiar en los profesionales de la salud y seguir sus orientaciones en los tratamientos que requieran el uso de medicamentos psicoactivos, siempre dentro de un marco controlado y con fines terapéuticos.
La DTSC subrayó que el estigma frente al consumo de estas sustancias limita el acceso de los pacientes a diagnósticos y terapias adecuadas, lo cual puede agravar los problemas de salud mental y aumentar las barreras de atención.
Finalmente, la entidad invitó a la comunidad a reflexionar sobre la necesidad de eliminar los prejuicios asociados a la salud mental y a adoptar prácticas seguras en el consumo de medicamentos o productos regulados, garantizando así un acceso oportuno, digno y responsable a los servicios de salud en el departamento.
