En la madrugada del 24 de diciembre de 2025, una persecución policial iniciada por uniformados del CAI Alhambra de la Policía Metropolitana de Bogotá en la autopista Norte con calle 116, en el sector de Suba, culminó en una intensa balacera en el centro de la ciudad, específicamente en la carrera 10 con calle 6 de San Victorino. El operativo, comandado operativamente por la teniente coronel Sandra Lancheros, dejó como saldo una persona muerta, dos hombres capturados y dos sujetos que lograron huir pese al plan candado desplegado por las autoridades.
Todo comenzó durante controles de rutina cuando los ocupantes de una camioneta de alta gama con placas de Medellín ignoraron la señal de pare, embistieron a los policías e iniciaron una huida durante la cual intercambiaron disparos con los uniformados. La persecución finalizó con el impacto del vehículo contra un taxi, lo que facilitó la captura de dos de los implicados, mientras los otros dos escaparon del cerco policial. Los capturados y el fallecido presentan antecedentes judiciales por porte ilegal de armas, fuga de presos e investigaciones por hurto, y se sospecha que el vehículo podría estar vinculado a actividades como transporte de armas o atracos.
Detalles del vehículo y cifras alarmantes
La camioneta involucrada acumula 22 infracciones de tránsito, conocidas como comparendos, incluyendo exceso de velocidad, ausencia de revisión técnico-mecánica y falta de SOAT vigente, con una deuda total de 21 millones de pesos. El cierre vial en la calle 6 con carrera 10, en sentido occidente-oriente, se extendió por más de dos horas, generando congestión en el centro de Bogotá y suspensión del tránsito en la zona.
Los dos hombres capturados fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la Nación, que adelanta una investigación en curso por tentativa de homicidio, porte ilegal de armas y daño en bien ajeno. Las autoridades analizan cámaras de seguridad y recogen testimonios para rastrear a los dos huidos, mientras el vehículo sometido a inspecciones técnicas y forenses podría revelar más sobre sus posibles nexos con delitos como hurto. Este incidente subraya los riesgos de los controles vehiculares en la capital y la importancia de la vigilancia sobre vehículos con extensos historiales delictivos.

















