Banco central revela el origen histórico de la expresión “lucas” en Colombia
En medio del debate sobre el salario mínimo para 2026 en el país, el Banco de la República presentó una nota histórica que esclarece el origen de una jerga muy usada para referirse al dinero: la palabra “lucas”. La explicación fue difundida por el Museo Casa de la Moneda, dependiente de la entidad, a través de sus canales oficiales.
La explicación arranca en la ciudad de Santafé (hoy Bogotá), durante el siglo XVIII. En esa época se acuñaban monedas de oro y plata con la efigie del monarca Fernando VI, perteneciente a la dinastía Borbónica. Estas piezas eran conocidas de forma informal como peluconas porque el retrato mostraba una peluca llamativa propia de la moda de la corte.
Con el tiempo, el vocablo dio paso a variantes populares: primero se acomodó como peluca y, más tarde, derivó en luca, que pasó a emplearse como una forma coloquial de referirse al dinero en general. Aunque las monedas de esa época ya no circulan, el término quedó instalado en la conversación cotidiana para aludir a montos en miles de pesos.
“La palabra ‘lucas’ tiene orígenes históricos vinculados a la moneda de la época colonial”, Museo Casa de la Moneda
Hoy día, cuando alguien dice “me costó cinco lucas”, se entiende como cinco mil pesos. El uso se ha expandido más allá de montos precisos y suele emplearse para aludir a cantidades monetarias en general, o para referirse de forma informal a la riqueza disponible, dependiendo del contexto.
“Este hallazgo contextualiza una expresión popular y la acerca a su raíz monetaria y lingüística”, Banco de la República
Además de lucas, existen otros términos que la gente utiliza para hablar de dinero en Colombia. A continuación, un resumen representativo, con ejemplos de uso típico:
- Plata: referencia general al dinero en cualquier situación informal.
- Billetes y fierros: los primeros denotan billetes y las segundas piezas, las monedas.
- Luka(s): variante común para mil pesos, especialmente en conversaciones cotidianas.
- Palo: cifra elevada; en la jerga, equivale a un millón de pesos.
- Chicharrón y manguito: expresiones coloquiales para aludir a dinero disponible o deudas, según el contexto.
La recopilación de estas expresiones, respaldada por la institución monetaria y su museo, evidencia cómo la historia de la moneda y las costumbres lingüísticas se entrelazan y se mantienen vivas en la conversación cotidiana de Colombia. Este vínculo entre monedas históricas y vocabulario popular ofrece una lectura adicional sobre la evolución cultural y económica del país.

















