La Junta Directiva del Banco de la República de Colombia decidió mantener la tasa de interés de referencia en 9,25 por ciento, tras analizar la evolución de la inflación en noviembre, que se situó en 5,3 por ciento anual, una leve desaceleración desde el 5,5 por ciento de octubre, pero aún por encima de la meta del 3 por ciento. En las minutas oficiales divulgadas, el emisor advirtió sobre riesgos inflacionarios y fiscales derivados del elevado incremento del salario mínimo para 2026, fijado en 1.423.500 pesos, en un contexto donde la demanda interna excesiva impulsa el crecimiento del PIB en el tercer trimestre a un 3,4 por ciento anual, liderado por un consumo privado que creció 5,6 por ciento, aunque con un déficit en la cuenta corriente del 2,4 por ciento del PIB y menores exportaciones de petróleo y carbón.
La inflación de alimentos descendió de 6,6 por ciento a 5,7 por ciento, y la de servicios de 5,9 por ciento a 5,7 por ciento, pero los precios regulados registraron alzas que contrarrestaron estas mejoras, mientras la inflación básica se mantuvo en 4,9 por ciento. Las expectativas de inflación para el horizonte de uno a dos años superan el 3 por ciento, y la proyección para el cierre de 2025 oscila entre 5,1 y 5,2 por ciento. Además, solo el 35,5 por ciento de los adultos colombianos, equivalentes a 13,7 millones de personas, tienen acceso a crédito formal a finales de 2024, en un panorama donde la formación bruta de capital muestra signos positivos pero aún por debajo de los niveles prepandemia. La decisión preserva una política monetaria restrictiva ante la persistencia de presiones inflacionarias.
Riesgos por el salario mínimo y disidencias internas
En las minutas, la Junta enfatizó los riesgos que implica un elevado incremento del salario mínimo, con un impacto fiscal significativo, mientras la expectativa de PIB para 2025 se ubica en 2,9 por ciento. Dos miembros defendieron un recorte de 50 puntos básicos en la tasa, argumentando bajo desempleo y mayor acceso a crédito productivo, y otro apoyó una reducción de 25 puntos por rigideces productivas y conflictos distributivos, en contraste con la tasa de la Reserva Federal de Estados Unidos, que se encuentra entre 3,5 y 3,75 por ciento.
“El proceso de caída de la inflación observado durante 2024 se interrumpió en 2025, hasta el punto de que la inflación de precios al consumidor es ahora más alta de la que se tenía un año atrás”
Junta Directiva del Banco de la República, minutas oficiales
“los riesgos inflacionarios que implicaría un elevado incremento del salario mínimo, el cual a su vez tiene un impacto fiscal significativo”
Junta Directiva del Banco de la República
La entidad subrayó que adelantar ajustes al alza en la tasa genera mayores dividendos en crecimiento económico, mientras postergarlos podría requerir tasas elevadas por más tiempo, aunque un integrante precisó que la persistencia inflacionaria tiene causas que no se resuelven solo con incrementos de tasas, ya que intentar resolverlo todo de esa forma resulta ineficaz y contraproducente. Esta postura se basa en datos del Dane sobre la inflación de noviembre y minutas del Banco de la República, reflejando un delicado equilibrio entre control inflacionario y dinamismo económico en Colombia.

















