En un episodio que reaviva el debate sobre la vida privada de las figuras públicas, Aida Victoria Merlano, influencer barranquillera y empresaria, respondió a las críticas sobre su maternidad, defendió su crianza de Emiliano y divulgó chats privados con su expareja, Juan David Tejada, conocido como “el Agropecuario”. Aunque la fecha exacta no está especificada en el material recibido, la actividad se desarrolló a través de publicaciones en redes sociales desde Barranquilla, Colombia, y la discusión giró en torno a la responsabilidad parental y la forma de educar a un hijo cuando la figura materna es visible en el escrutinio público.
La escena central de la controversia fue un video en el que Merlano defiende su criterio de crianza y expone conversaciones privadas con Tejada, al tiempo que denuncia la supuesta falta de apoyo económico por parte del padre y afirma un proyecto de respaldo financiero para Emiliano, que incluye un CDT para su universidad y un capital para cuando decida emprender. En su relato, la influencer subraya que ser una madre presente no implica renunciar a su vida personal ni convertirse en una carga para otros, y sostiene que no debe permitirse que terceros cuestionen su forma de criar. Entre los puntos mencionados sale a relucir la realidad de la relación con su hijo: 20 días sin verlo, y la insistencia en la idea de que durante cuarenta días su pequeño dormía sobre su pecho para afianzar un apego seguro, además de reconocer que trasnocha sin ayuda alguna y que, pese al desgaste, entiende su modo de crianza como una opción legítima.
Defensa de la maternidad y exposición de chats desatan un intenso debate en redes
En el desarrollo de la conversación pública, Merlano también compartió mensajes que buscan justificar su modalidad de crianza y su necesidad de mantener momentos personales. Aseguró que su hijo cuenta con un plan de respaldo económico para su educación, lo que, según ella, demuestra la responsabilidad que asume como madre. Las publicaciones incluyen reflexiones sobre la autonomía de la madre frente a las críticas y la defensa de un estilo de vida que, en sus palabras, le permite estar presente para Emiliano sin sacrificar su identidad ni sus proyectos personales.
«He estado noches y noches con él, jamás lo dejo solo, y todo lo hago pensando en garantizarle un buen futuro» – Aida Victoria Merlano
«Mi hijo tiene un CDT para su universidad y un capital para cuando decida emprender» – Aida Victoria Merlano
«Durante cuarenta días mi hijo dormía sobre mi pecho porque yo quería afianzar su apego seguro y me acostaba a las seis de la mañana. Yo trasnoché todos y cada uno de los días sin ayuda de nadie, vieja, patética y zarrapastrosa» – Aida Victoria Merlano
«Arriba hay un Dios que todo lo ve, solo pasaba a decirles que no me voy a dejar provocar de ningún jueguito a los que está acostumbrada. Dejemos todo en manos de Dios que se encargará de poner todo en su lugar. Soy un caballero y lo seguiré siendo siempre. En algún momento las máscaras se caerán» – Juan David Tejada
«Con mi maternidad no se metan» – Aida Victoria Merlano
El trasfondo de la noticia, que ya es familiar para quienes siguen a Merlano, sitúa a la influencer como una figura relevante en Barranquilla y en el entorno de las redes, mientras Emiliano es su hijo nacido de la relación con Tejada, quien también figura en la conversación pública. El hecho de exponer chats privados y de responder a críticas sobre la crianza ha reavivado la discusión sobre cuánto debe residir la vida personal de una madre pública dentro de la esfera pública y qué responsabilidades corresponde a los padres, especialmente cuando la evidencia de apoyo económico y planes de futuro se mencionan en público.
