La Comisión de Disciplina Judicial de Bogotá abrió una investigación disciplinaria contra el abogado Miguel Ángel del Río, defensor de Daniel Garcés Carabalí, por presuntas irregularidades en la defensa y conflictos de interés en un caso de violencia intrafamiliar. La citación para declarar ante la Comisión está fijada para el 2 de febrero de 2026, en la sede de la entidad en Bogotá, y la investigación se sustenta en la Ley 1123 de 2007, con énfasis en los artículos 28, 33 y 34, que trazan el marco de las actuaciones administrativas, la evaluación de actuaciones y los posibles conflictos de interés involucrados.
Beatriz Niño Endara, expareja de Garcés Carabalí y denunciante en el proceso penal, presentó la denuncia ante la Comisión argumentando conflicto de intereses y manipulación de testigos. Garcés Carabalí, exembajador en Ghana, es señalado por Beatriz Niño Endara de violencia psicológica y física y de haberle retirado la custodia de sus hijos. En el expediente se indica que Bermúdez y Uriza, empleadas domésticas citadas como testigos, habrían sido apoderadas por Del Río para sus declaraciones y que el abogado habría gestionado aplazamientos en el curso del proceso. Además, Uriza declaró ante la Fiscalía que los honorarios de su representación eran pagos por Garcés Carabalí, y que ambas testigos acudieron acompañadas por abogados de la oficina de Del Río.
Subtítulo
La audiencia de pruebas y calificación, enmarcada dentro de la investigación disciplinaria, podría derivar en sanciones si se verifica incumplimiento de la Ley 1123 de 2007, especialmente en lo relativo a lealtad, manejo de información, independencia y posibles conflictos de interés. La cobertura periodística de este caso, según las informaciones difundidas por W Radio y Colprensa, se basa en fuentes cercanas al proceso que destacan la participación de testigos citados y la presunta gestión del abogado Del Río sobre las declaraciones de Bermúdez y Uriza.
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En definitiva, este capítulo añade una nueva dimensión a la controversia que rodea a Garcés Carabalí y a Beatriz Niño Endara, mientras la Comisión de Disciplina Judicial de Bogotá avanza en la revisión de si hubo irregularidades en la defensa y conflictos de interés que podrían derivar en sanciones disciplinarias, de comprobarse las irregularidades señaladas en la denuncia.
