Desde La Veintitrés Manizales, reportamos que Simeón Pérez Marroquín, conocido como “el Viejo” o, para algunos, “la Firma”, fue imputado por homicidio agravado, concierto para delinquir, uso de menores en la comisión de delitos y porte ilegal de armas de fuego en relación con el atentado contra Miguel Uribe Turbay, figura política que aspiraba a la presidencia y actuaba como precandidato y senador. Las autoridades señalan que Pérez Marroquín mantiene vínculos con la organización disidente Segunda Marquetalia y que, presuntamente, dirigía una red criminal desde la base de operaciones ubicada en el barrio El Muelle de Engativá, Bogotá, mientras coordinaba la logística y el seguimiento de la operación. El hecho principal ocurrió el 30 de marzo de 2025, durante un acto celebrado en el Barrio Antonia Santos de Bosa, en un salón comunal, y la investigación indica que la ruta de escape y la vigilancia estuvieron a cargo del imputado; la detención se produjo meses después, el 27 de octubre de 2025, en el caserío Brisas del Güejar, zona rural de Puerto Lleras, Meta.
A la luz de estos hechos, los investigadores detallan que Pérez Marroquín coordinaba y dirigía la red criminal; Brayan Ferney Cruz Castillo era identificado como el ejecutor, mientras Katherine Andrea Martínez, alias Gabriela, sería trasladada a Caquetá para entrenamiento en drones y francotiraje. Las comunicaciones y las anotas de campo señalan que Brayan reportaba avances y seguimientos; que el plan contemplaba el uso de un menor de edad en la ejecución; y que la ruta de entrega y escape apuntaba hacia Florencia, Caquetá, con indicaciones sobre el hotel en el que debían hospedarse mientras los recogían. En total, el equipo compilaría un informe de campo de 21 páginas y revisaría chats de WhatsApp, además de analizar dispositivos y antenas repetidoras que situaron el equipo en el lugar del atentado entre las 8:00 a. m. y la 1:00 p. m. del 30 de marzo de 2025. La Fiscalía señala que la investigación ha entrado en una segunda fase y que la evidencia sugiere una ruta de acción diseñada desde el inicio, con un claro control de la operación por parte de Pérez Marroquín.
Imputación y avances de la investigación
Entre los datos recabados se destacan antecedentes previos de Pérez Marroquín por fabricación, tráfico y porte de armas, y la convicción de que su red mantiene vínculos con la Segunda Marquetalia. En cuanto a las pruebas, la fiscalía indicó que existen mensajes y documentos que consolidan la conveniencia de la acusación y fortalecen la hipótesis de una estructura criminal organizada con liderazgo claro. En lo que respecta a la víctima, Miguel Uribe Turbay, las observaciones de la fiscalía incluyen que recibió múltiples alertas de peligro por correo electrónico en al menos 223 ocasiones, lo que sostiene la hipótesis de que la planificación buscaba neutralizar una figura de alto perfil político. El atentado que se atribuye a Pérez Marroquín fue seguido de la captura del sospechoso el 27 de octubre de 2025, una acción que la Fiscalía considera clave para el desarrollo de la segunda fase de la investigación.
«lo siguió y lo fotografió» – Deicy Jaramillo, fiscal delegada para la seguridad territorial
«La evidencia que nosotros tenemos es la cercanía de Simeón Pérez Marroquín con la Segunda Marquetalia. En realidad, la Fiscalía ha insistido en que esa es la ruta que la evidencia le ha marcado casi que desde el principio» – Luz Adriana Camargo, fiscal General
«Rol de Viejo: actúa como líder y coordinador. Él supervisa a Brayan, le advierte sobre los riesgos (‘no se vaya a dejar atrapar’), indicando y controla la logística de la operación, decidiendo el destino final de la ‘señora’ al confirmarle el hotel» – Extracto de informe de campo (21 págs.)
«Rol de Brayan: es el ejecutor. Obedece las instrucciones y reporta el progreso de la operación. La conversación es breve y centrada en la seguridad y el control. Esto indica que se trata de una actividad criminal organizada, donde cada movimiento está planificado y supervisado por una autoridad superior. Como se evidencia en las conversaciones» – Extracto de informe de campo (21 págs.)
«El Viejo impartía instrucciones precisas para eliminar pruebas de los teléfonos celulares y evitar su captura: ‘No se dejen coger’, insistía en sus mensajes» – Extracto de informe de campo (21 págs.)
«Hola, mi amor, ahí salieron las camionetas, yo les avisé, salió la blanca y salió la otra detrás, ahí salió esa gonorrea (…) No, cómo así que en qué nube ando, si estoy ahí, están saliendo, les estoy escribiendo, ahí van subiendo, ahí subieron esas pirobas, la TX y la otra» – Brayan Ferney Cruz Castillo
Contextualmente, este caso no es aislado: la base de operaciones de la organización se ubicaba en el barrio El Muelle, Engativá; Pérez Marroquín coordinaba y dirigía la red, Brayan Ferney Cruz Castillo era el ejecutor y la ruta de entrega y escape estaba claramente trazada hacia Florencia, Caquetá. En los “datos secundarios” se señalan también otros involucrados citados en el material, como Katherine Andrea Martínez, alias Gabriela; y otros nombres mencionados en los informes, como “Cucho” y “Flaco”. Las evidencias incluyen chats de WhatsApp analizados, informes de campo de 21 páginas, y un seguimiento de dispositivos y antenas que sitúan al imputado en el lugar del atentado en el intervalo citado. La captura de Pérez Marroquín, realizada el 27 de octubre de 2025 en el caserío Brisas del Güejar, zona rural de Puerto Lleras, Meta, culmina una fase de investigación que, según la Fiscalía, continúa para identificar a otros responsables y posibles responsables a distintos niveles de la operación.
Aunque la Fiscalía continúa con la recopilación de pruebas, estas evidencias fortalecen la narrativa de una organización disidente que buscaba dañar a una figura política de alto perfil y, al mismo tiempo, ejecutar una operación controlada por una autoridad superior dentro de la red. Este caso sitúa de manera clara la interacción entre un grupo al margen de la ley y el atentado contra un precandidato presidencial, lo que pone la lupa sobre la seguridad de la política colombiana y las medidas necesarias para prevenir futuros incidentes.
















