La CAM emitió el 20 de noviembre de 2025 una alerta sobre la presencia y avance de siete especies exóticas invasoras en el Huila, una señal de alarma para la biodiversidad y la economía local, informó Paula Sánchez Castañeda, profesional de la CAM, en la cobertura de La Veintitrés Manizales.
La profesional señaló que estas especies están desplazando a las nativas por su alta propagación y por la competencia por recursos biológicos, además de la modificación de hábitats naturales, lo que altera las dinámicas ecológicas y repercute en la economía regional. La CAM subraya la necesidad de iniciar controles y procesos de erradicación y recuerda a la ciudadanía que no debe cultivar, propagar ni comercializar estas especies; también invita a reportar avistamientos a la CAM o a registrarlos en iNaturalist para facilitar su monitoreo y respuesta.
Alerta en el Huila: siete invasoras identificadas y un marco de referencia nacional
Entre las cifras relevantes se confirma que hay siete especies invasoras identificadas en el Huila. Entre las plantas invasoras destacan el Ojo de Poeta, cuyo nombre científico es Thunbergia alata; el Tulipán Africano, Spathodea campanulata; Neem, Azadirachta indica, y Algodoncillo, Calotropis procera; en fauna aparecen el Caracol Africano, Achatina fulica; el Pez Basa, Pangasianodon hypophthalmus; y la Trucha Arcoíris, Oncorhynchus mykiss. A nivel nacional, el Ministerio de Ambiente registra más de 900 especies introducidas y casi 100 consideradas de alto riesgo.
El Caracol Africano puede poner hasta mil huevos al año, un dato que ilustra la velocidad de propagación de estas especies y la magnitud del desafío que representa para los ecosistemas y la economía local, especialmente en áreas agrícolas y de producción rural.
«En el departamento del Huila existen siete especies exóticas invasoras que están desplazando a nuestras especies nativas por su alta propagación, competencia de recursos biológicos y modificación de los hábitats naturales, alterando además las dinámicas ecológicas y la economía local por propagación de patógenos y la dificultad en su control y erradicación», explicó Sánchez Castañeda. – Paula Sánchez Castañeda, profesional de la CAM
El contexto necesario revela que las especies invasoras representan una grave problemática en Colombia, con un registro oficial de más de 900 especies introducidas y un grupo cercano a las cien consideradas de alto riesgo. Los impactos incluyen fauna y flora nativas desplazadas y la alteración de cadenas tróficas, con efectos significativos tanto en la biodiversidad como en los ingresos de comunidades que dependen de los recursos naturales. Ante este panorama, las autoridades insisten en la cooperación ciudadana y en la coordinación entre entidades ambientales y la población para fortalecer la vigilancia, la prevención y las acciones de control.
La recomendación práctica se mantiene clara: evitar cultivar, propagar o comercializar estas especies y reportar avistamientos a la CAM o registrarlos en iNaturalist para facilitar su control y evitar su expansión, un llamado a la acción que busca involucrar a la ciudadanía en la protección de los ecosistemas del Huila y la economía local.

















