Camioneta cae 20 metros al cañón del río Sogamoso en Santander por descuido en freno de mano

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Una camioneta blanca sin ocupantes se precipitó 20 metros al cañón del río Sogamoso en Santander, en un incidente ocurrido el 26 de diciembre cuando cuatro turistas que viajaban desde Girón hacia Zapatoca se detuvieron para observar el paisaje. Los visitantes, ilesos y sin víctimas fatales, habían estacionado el vehículo en una pendiente cercana a la carretera sin activar el freno de mano, lo que provocó que rodara hasta el abismo debido al pavimento liso por recientes obras de pavimentación.

El rescate del vehículo se llevó a cabo dos días después, el 28 de diciembre, gestionado por alféreces de Girón con el apoyo de dos grúas de gran capacidad. La camioneta quedó completamente destrozada, con cristales destruidos, carrocería deformada y llantas desprendidas, pero la vía recuperó la normalidad poco después del operativo. Este suceso se suma a los múltiples cierres viales en Santander, como el kilómetro 10+200 en La Paz-Lebrija, el kilómetro 30+100 en Fortuna-Bucaramanga, el kilómetro 70+500 en Puente Nacional-Bucaramanga y el cierre total de la Transversal del Carare.

Advertencias de las autoridades ante riesgos en zonas turísticas

El capitán José Caballero Julio, de la Policía de Carreteras de Santander, detalló las circunstancias del accidente, destacando el descuido al dejar el vehículo sin asegurar en la esquina mientras los turistas tomaban fotos en el popular cañón del Sogamoso, un destino frecuentado por visitantes atraídos por su belleza natural.

“Dejaron el vehículo en la esquina, pero sin freno, luego se percataron que el vehículo cayó al abismo. Eran cuatro turistas y manifiestan que iban hacia Zapatoca. Fueron aproximadamente 20 metros lo que rodó”.

José Caballero Julio, capitán Policía de Carreteras de Santander

Las autoridades reiteraron recomendaciones clave para prevenir similares percances, como siempre activar el freno de mano en pendientes y verificar la posición del vehículo antes de alejarse, especialmente en carreteras con condiciones resbaladizas por obras o en áreas escarpadas como esta zona turística de Santander.

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