Leandro Ugarte, secretario de Víctimas de Cúcuta, lanzó una alerta por el desplazamiento forzado sostenido y sin precedentes proveniente de la región del Catatumbo hacia Cúcuta, en Norte de Santander. Desde el 17 de enero de 2025 se registra un flujo constante de familias que buscan refugio, con un pico notable entre el 22 y el 29 de diciembre de 2024, cuando llegaron 230 núcleos familiares equivalentes a 580 personas. Este fenómeno, impulsado por la violencia en las zonas rurales del Catatumbo, ha desbordado la capacidad de atención local.
Las familias desplazadas arriban principalmente en busca de autoalbergue, recibiendo atención inicial con kits de alimentación y aseo en coordinación con entidades locales. La mayoría de los llegados son cabezas de núcleo familiar, quienes demandan servicios urgentes en salud, educación y apoyo psicosocial. Ugarte enfatizó que este desplazamiento continuo genera una presión humanitaria sin registros comparables en años anteriores, obligando a la administración municipal a gestionar recursos adicionales ante la insuficiencia presupuestal.
Insuficiencia de recursos y llamado a acción nacional
El volumen de desplazados ha superado la planeación presupuestal de Cúcuta, sin albergues temporales disponibles y con un presupuesto finito que no alcanza para sostener la atención. Las autoridades locales han enviado reportes a las instancias nacionales y acuden a la Unidad para las Víctimas para iniciar subsidios y entregas de apoyo. Ugarte destacó la magnitud histórica de esta crisis, describiéndola como el desplazamiento más grande en la historia de Colombia.
«Desde el 17 de enero a la fecha, este desplazamiento ha sido continuo. Del 22 al 29 de diciembre hemos recibido 230 núcleos en Cúcuta. Esto da un total de 580 personas.»
Leandro Ugarte, secretario de Víctimas de Cúcuta
«Tenemos insuficiencia presupuestal para seguir atendiendo; estamos acudiendo a la Unidad para las Víctimas para iniciar subsidios y que nos apoyen con entregas. El presupuesto es finito y el desplazamiento no ha parado.»
Leandro Ugarte, secretario de Víctimas de Cúcuta
En medio de esta emergencia, Ugarte solicitó de manera urgente la convocatoria de una alerta nacional para enfrentar el flujo incesante de víctimas que continúan llegando sin pausa.
«Las personas que están arribando son básicamente cabeza de núcleo y cuando llegan buscan autoalbergue. El desplazamiento que hemos vivido este año es sin precedentes, el más grande en la historia de Colombia. Pedimos que se convoque una alerta nacional.»
Leandro Ugarte, secretario de Víctimas de Cúcuta
Esta situación pone en evidencia la persistente violencia en el Catatumbo y la necesidad de una respuesta coordinada a nivel nacional para mitigar el impacto humanitario en Cúcuta y garantizar la protección de las familias afectadas.
