El partido Centro Democrático anunció en la tarde del 15 de diciembre de 2025 que la senadora Paloma Valencia será su candidata presidencial oficial para las elecciones de 2026, tras superar en una encuesta interna a sus competidoras María Fernanda Cabal y Paola Holguín. Este resultado pone fin a una intensa campaña interna que se extendió desde finales de 2024 y que estuvo marcada por fuertes polémicas, especialmente en torno a Cabal, quien acumuló disputas públicas con figuras clave del partido como el exsenador Miguel Uribe Turbay, asesinado en septiembre de 2025 en Bogotá, su viuda María Claudia Tarazona, su padre Miguel Uribe Londoño y hasta con el escándalo protagonizado por su propio hijo, Juan José Lafaurie Cabal.
La elección se definió mediante una encuesta realizada entre militantes y dirigentes del partido en diversas ciudades de Colombia, incluyendo Bogotá y Medellín, donde las tensiones se hicieron evidentes en redes sociales como X, entrevistas y eventos como el velorio de Uribe Turbay en el Capitolio Nacional. Las disputas comenzaron en abril de 2025 con un choque entre Cabal y Uribe Turbay por el financiamiento de encuestas, escalaron en septiembre durante el velorio del exprecandidato presidencial y continuaron en noviembre con un conflicto entre Cabal y Uribe Londoño, culminando el 1 de diciembre con la exclusión de este último del partido por respaldar al abogado Abelardo de la Espriella. Esta es la segunda derrota de Cabal en encuestas internas, recordando su pérdida en 2022 frente a Óscar Iván Zuluaga, en un contexto de precandidaturas que incluyeron gastos millonarios, como los cerca de cien millones de pesos mensuales invertidos en la campaña de Uribe Turbay.
Polémicas internas que definieron la contienda
Uno de los episodios más controvertidos ocurrió durante la campaña interna cuando Cabal cuestionó públicamente una encuesta que calificó como «pagada» por Uribe Turbay, afirmando que no participaría en peleas fratricidas y priorizando a Colombia por encima de todo. Uribe Turbay respondió negando haber financiado o difundido esa medición, subrayando la importancia de lo que indicaban los sondeos reales. Las tensiones se agravaron en el velorio de Uribe Turbay, donde Tarazona acusó a Cabal de haberle dicho «tú no conoces Colombia, tú no sabes lo que es este país, tú no sabes lo que aquí está pasando», grabado accidentalmente por un micrófono que Cabal llevaba puesto para una entrevista previa. Cabal desmintió el comentario con total transparencia, negando cualquier amenaza.
«Uno tiene que ser respetuoso con el partido, que dé ejemplo de austeridad y no podemos hacer lo que reprochamos en otras campañas. La plata se tiene que respetar.»
María Fernanda Cabal, senadora
Otro foco de controversia involucró al hijo de Cabal, Juan José Lafaurie Cabal, quien obtuvo un crédito de cuatrocientos millones de pesos en Serfinanza en el departamento del Cesar, además de un incentivo al máximo legal del programa Capitalización Rural y garantías que cubrían el 80% de la obligación en el Fondo Agropecuario, al presentarse como pequeño productor agropecuario. Cabal evadió responsabilidad directa al decir «que conteste mi marido o mi hijo, que son muy grandes. Yo no», mientras su padre, José Félix Lafaurie, ocupa un puesto en la Junta Directiva de Finagro. Adicionalmente, Cabal contactó unilateralmente a la firma Atlas Intel en relación con Uribe Londoño, avivando las divisiones que llevaron a su exclusión partidaria.
Hacia las elecciones de 2026 con tensiones latentes
Con Paloma Valencia como candidata oficial, el Centro Democrático se alista para las presidenciales de 2026, dejando atrás un año de definiciones internas plagadas de escándalos que expusieron fracturas profundas en el uribismo. La designación de Valencia representa un intento de unidad tras el magnicidio de Uribe Turbay y las exclusiones recientes, aunque las polémicas persisten como sombra sobre el futuro de figuras como Cabal y Holguín en la contienda nacional.
