En el marco del Día de Velitas 2025, que se celebra el 7 de diciembre alrededor de las 7:00 p.m. en hogares y ciudades de todo Colombia, un informe de La Kalle, elaborado en consulta con ChatGPT, presenta una guía de cinco rituales clave para atraer dinero y abundancia según la tradición popular. Estas prácticas buscan renovar la energía, cerrar ciclos y manifestar prosperidad mediante simbólicos actos con velas, faroles y elementos naturales, integrándose perfectamente a las festividades que inician la temporada navideña y anteceden la Inmaculada Concepción.
El Día de Velitas es una tradición anual arraigada en la cultura colombiana, donde las familias encienden velas y faroles para purificar el ambiente y pedir deseos, acompañados de recorridos por barrios, concursos, música y gastronomía típica como buñuelos, natilla y empanadas. Este año, el enfoque está en rituales específicos que combinan lo ancestral con toques modernos, utilizando incienso de lavanda o sándalo para mayor efectividad.
Rituales para invocar abundancia y buena energía
Uno de los rituales destacados inicia con una purificación por fuego: se escribe en un papel los propósitos o reflexiones del año, para luego quemarlo con una vela blanca, liberando así lo negativo y preparando el terreno para lo nuevo, con la recomendación de guardar una copia para revisarla después. Le sigue el baño energético, preparado con una infusión de sal marina, salvia blanca, romero y limón, que se vierte en el cuerpo mientras se encienden velas de colores específicos, como las amarillas para atraer abundancia económica y las verdes para salud. Posteriormente, se arma un altar de gratitud adornado con velas, flores frescas, monedas, arroz y frutas, simbolizando la prosperidad que se desea recibir.
El cuarto ritual consiste en afirmaciones poderosas: frente al altar, se declaran en voz alta los deseos de prosperidad, reforzando la intención con la llama de las velas. Finalmente, el quinto ritual integra la tradición de encender faroles hechos de cartulina o papel seda, que no solo iluminan los hogares sino que también manifiestan buena fortuna al pasear por las calles. Para mayor seguridad, especialmente en presencia de menores, se sugiere optar por velas LED en lugar de las de cera tradicional.
Estas prácticas, profundamente simbólicas, se realizan en miles de hogares colombianos cada 7 de diciembre, fusionando fe, esperanza y alegría en un ritual colectivo que promete cerrar el año con optimismo y abrir las puertas a la abundancia en el próximo.
